El diluvio

3

      Mientras los hombres se esparcían por toda la tierra, ellos seguían en la impiedad por todas partes. Sus pensamientos eran de continuo solamente el mal. Dios decidió destruir al hombre, excepto al fiel Noé y su familia. Noé aceptó la gracia de Dios y aprovechó el escape ofrecido. E1, sus tres hijos, sus mujeres y dos de cada especie de vida animal sobrevivieron en el arca.

      Ahora hemos regresado a una sola familia, la de Noé. Pero hay tres hijos, así que ningún historiador humano podría haber sabido en este momento a qué hijo seguir. Pero Dios guió al escritor a seguir la línea a través de Sem, mencionando brevemente los descendientes de Cam y Jafet. E1 escritor se ocupa de las naciones que vinieron a través de Cam y Jafet solamente cuando estas se relacionan con los descendientes de Sem.

      Muchas gentes salieron de Sem, pero el relato divino estrecha la historia aun más. Los años pasaron y los hombres ya no vivieron tanto tiempo como antes. Pronto los doscientos o aun menos años eran una larga vida.

      Unas nueve generaciones pasan desde Noé, y llegamos a un hombre llamado Taré, que vive en Ur de los Caldeos. Había tres hijos en esta familia también: Nacor, Abram y Harán. Harán murió mientras ellos estaban aún en Ur, y por un lapso de tiempo la historia continúa con su hijo Lot, porque el viajó con Abram, el personaje más importante.

      Dios llamó a Abram (Abraham, como llegó a llamarse), y le dijo que dejara su familia y fuera a una tierra que se le mostraría. Abraham obedeció y fue conducido a la pequeña tierra de Canaán. Se le hizo una promesa triple: Se le dijo que su descendientes serían hechos una gran nación, que esa nación heredaría la tierra de Canaán, y que a través de su simiente, todas las familias de la tierra serían benditas.(Gén.12:1‑7). E1 resto de la Biblia es la historia del cumplimiento de estas tres promesas.

 

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