"Y No Os Juzgáis Dignos De La Vida Eterna"

Hech. 13:46

 Introducción:

A.       Ellos mismos se juzgaban a sí mis­mos indignos de la vida eterna.

B.        ¿Qué clase de gente hace tal cosa?

I. Tuvieron Un Buen Principio. Comen­zaron Bien.

A.     Hech. 13:15, querían oír el mensaje de Pablo; ver. 43, "Y despedida la congre­gación, muchos de los judíos y de los prosélitos ... siguieron a Pablo y a Ber­nabé".

B.     Les exhortaron a perseverar en la gracia. Los que oyen con sinceridad la Palabra y la siguen están "en la gracia de Dios".

C.     Sal. 85:8, "Escucharé lo que hablará Jehová Dios ...".

 D. Ver. 44, el siguiente sábado, "se juntó casi toda la ciudad para oír".

II. Los Judíos "Se Llenaron De Celos". Ver. 45. Mat. 27:18; Gál. 5:21.

A.       Los gentiles podían asistir a las reu­niones de las sinagogas, pero normal-mente los judíos superaban en número a los gentiles. Sin embargo, en esta ocasión "casi toda la ciudad" estuvo presente.

B.        Toda referencia aquí a los gentiles indica que oían con buena voluntad (vers. 42, 48), pero cuando los gentiles acep­taron lo que Pablo predicaba, entonces los judíos se llenaron de celos y rechazaron lo que Pablo predicaba. Debemos reconocer el gran peligro de los celos; provocan una reacción y una conducta muy re­prochables.

C.       Además, en el primer sermón (ver. 39) Pablo había dicho que "por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados". Sin duda esta afirmación irritó a los judíos.

III. "Rebatían Lo Que Pablo Decía, Con­tradiciendo Y Blasfemando", ver. 45.

A.     En el primer sermón Pablo advirtió contra tal actitud, 13:40, 41.

B.     Compárense Hech. 18:5, 6 "oponiéndose y blasfemando".

C.     También Hech. 19:8, 9 "Pero en­dureciéndose algunos y no creyendo, maldiciendo el Camino ...".

D.     Pablo cita varias profecías del An­tiguo Testamento, profecías que se leían cada sábado en las sinagogas, y muestra claramente que Jesucristo es el cumpli­miento de ellas (13:29-41; Luc. 24:25, 44-47).

E.      Pero como Pablo explica en 13:27 los judíos "no conociendo a Jesús, ni las palabras de los profetas que se leen todos los días de reposo, las cumplieron al con­denarle". "No conocer" quiere decir no entender y no aceptar la verdad.

F.      Pablo explica esto también en 2 Cor. 3:12-15, diciendo que "el entendimiento de ellos se embotó (se endureció); porque hasta el día de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descu­bierto ... cuando se lee a Moisés, el velo está puesto sobre el corazón de ellos".

IV. Desecharon La Palabra, ver. 46. Mat. 13:14, 15; Hech. 28:26, 27.

A.     Estos judíos siguieron el ejemplo de sus antepasados, y el ejemplo de los que crucificaron a Jesús. Mat. 23:37, Jesús diría la misma cosa a ellos.

B.     Imitaron a los perseguidores de Es­taban, Hech. 7:51, "resistís siempre"; 13:50, "Pero los judíos instigaron a mu­jeres, etc. ... levantaron persecución".

C.     Rechazaron el privilegio y honor de ser los primeros que oyeron el evangelio.

1.      Ver. 46, "A vosotros a la verdad era necesario que se os hablase primero".

2.      Hech. 2, el evangelio fue predicado primeramente a los judíos, Rom. 1:16.

3.      Mat. 10:5-7, "id antes a las ovejas perdidas de la casa de Israel".

V. Los Gentiles "Ordenados Para Vida Eterna", ver. 48.

A.     "Ordenados" (TASSO) poner en orden, arreglar; 1 Cor. 16:15 "se han dedicado (tasso) al servicio de los santos"; Hech. 15:2, "se dispuso (determinaron)".

B.     Los calvinistas usan mal este texto para enseñar la predestinación o la elec­ción especial; dicen que fueron "ordenados para vida eterna" por Dios. Pero no hay nada en el contexto que in-dique alguna acción de Dios. Se presenta el contraste entre la actitud de los judíos y la de los gentiles. Estos gentiles estaban determinados o dispuestos para la vida eterna, por su buena voluntad. 1 Cor. 16:15 dice que los de la familia de Esté­fanas "se han dedicado" a sí mismos al ser-vicio; así también estos gentiles estaban dispuestos por su propia voluntad a obede­cer, pero los judíos estaban dispuestos por su propia voluntad a blasfemar.

 

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