LA IDENTIDAD DE LA IGLESIA

Introducción.

      A. ¿Cómo se identifica o describe la iglesia del Nuevo Testamento?

      B. ¿Puede esa misma iglesia existir en la actualidad?

      C. Muchas iglesias reclaman ser la iglesia de la Biblia, aun usando desig-naciones bíblicas. ¿Cómo puede uno examinar o investigar tales iglesias para saber si es cierto o no lo que dicen?

      D. El N. T. nos proporciona la descripción de la iglesia. Podemos saber su identidad, como podemos saber la identidad de alguna persona.

I. LO QUE LA IGLESIA NO ES.

      A. No es un edificio. Para mucha gente es simplemente algún edificio o catedral.

      B. No es una secta. Hech. 24:5, los judíos decían que la iglesia fue una “secta”, pero Pablo corrigió este concepto, explicando que es “el camino”. En otra ocasión (Hech. 28:22, dijeron lo mismo (que era una “secta”), y Pablo explicó (v. 23, 31) que más bien la iglesia es el “reino” de Cristo.

      C. No es una denominación. No es “el cuerpo invisible de Cristo” compuesta de todas las denominaciones.

          1. Muchos citan Jn. 15:1, 2 para probar que las denominaciones son sarmientos de la vid, pero el v. 5 dice “el que” y el v. 6 “si alguno”. Cristo no habla de iglesias (mucho menos de denominaciones), sino de sus discípulos que individualmente deben llevar fruto o de otro modo serán cortados.

          2. En cuanto a denominaciones recordemos Mat. 15:13, “toda planta que mi Padre celestial no haya plantado, será desarraigada” (Jesús habla de ciertas sectas religiosas y sus tradiciones humanas).

      D. No es un club social ni tampoco una agencia de asistencia pública como la Cruz Roja. Todo cristiano debe ser servicial y ayudar a los necesitados, pero la obra de la iglesia es la de predicar el evangelio y salvar almas (Rom. 1:16; 1 Tim. 3:15). En cuanto a benevolencia, la ofrenda de la iglesia es para los “santos necesitados” (1 Cor. 16:1-4; 2 Cor. 8, 9).

II. ¿QUÉ ES LA IGLESIA?

      A. Mat. 16:18, “edificaré mi iglesia”. ¿De qué habla? ¿Cuál es la naturaleza de la iglesia que Cristo edificó? ¿Cuándo la edificó? ¿Dónde?

      B. Es el conjunto de todos los salvos. Fue establecida en Jerusalén, el día de Pentecostés (Hech. 2). Cuando 3000 personas obedecieron al evangelio (v. 38, 41) fueron “añadidos” para formar la iglesia. V. 47, “Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que iban siendo salvos”. Desde ese día el N. T. habla de la iglesia como una realidad. Ya existía.

      C. ¿Cómo se llama? Simplemente “la iglesia” (Hech. 8:3), “la iglesia del Señor” (Hech. 20:28); “la iglesia de Dios” (1 Cor. 1:2); “la iglesia de los primogénitos” (Heb. 12:23); “iglesias (congregaciones) de Cristo” (Rom. 16:16). Decimos “iglesia de Cristo” porque es de Cristo, es posesión de Cristo, El la compró con su sangre (Hech. 20:28).

      D. Es el REINO DE CRISTO, Mat. 16:18, “iglesia”, v. 19, “reino”; Col. 1:13, “trasladados al reino” = “añadidos a la iglesia”. La iglesia participa de la cena del Señor

(1 Cor. 11:23-27) y Jesús dice que su mesa está en su reino (Luc. 22:30). Somos ciudadanos de su reino. Somos los súbditos de Cristo. Esta figura enfatiza nuestra participación en el reinado de Cristo, porque creemos, enseñamos y practicamos sus enseñanzas.

      E. Es el CUERPO DE CRISTO, Efes. 1:22, 23. Los cristianos son miembros de su cuerpo, 1 Cor. 12:14-20. Como los miembros del cuerpo son gobernados por la cabeza, así también los miembros del cuerpo de Cristo son gobernados por El. Además, Cristo obra por medio de su cuerpo, la iglesia. Jesús tiene un solo cuerpo (Efes. 4:4).

      F. Es el REBAÑO DE CRISTO, Hech. 20:28. Cristo es el Buen Pastor que dio su vida por sus ovejas (Jn. 10:14) y sus ovejas le siguen. Compárese el Salmo 23. Cristo nos guía, nos alimenta, nos protege.

      G. Es el TEMPLO DE DIOS, 1 Cor. 3:16; Efes. 2:19-22. La figura de un templo indica que la iglesia existe para adorar a Dios (Efes. 3:21).

          1. 1 Ped. 2:5, somos casa de Dios y sacerdocio santo para ofrecer sacrificios espirituales. Heb. 13:15; Fil. 4:18.

          2. Jn. 4:24,  la iglesia verdadera le adora “en espíritu y en verdad” es decir, le ama y le adora con todo el corazón de la manera que El nos ha enseñado en su Palabra. Cinco actos de culto: Cantar sin usar instrumentos de música (se hace melodía en el corazón) (Efes. 5:19); orar (1 Tes. 5:17); predicar y enseñar, 1 Tim. 3:15; participar de la cena del Señor cada primer día de la semana (1 Cor. 11:23-27; Hech. 20:7); ofrendar (1 Cor. 16:1, 2; 2 Cor. 9:6,7).

      H. Es la ESPOSA DE CRISTO, 2 Cor.11:2; Apoc. 19:7-9.

          1.  Efes. 5:26. Desde luego, Cristo tiene solamente una esposa. El la ama y se entregó a sí mismo por ella.

          2  Efes. 5:27. Por eso, espera que le sea fiel a El y que no tenga mancha ni arruga ni cosa semejante.

III. EL GOBIERNO DE LA IGLESIA.

      A. Cristo es la Cabeza, Col. 1:18.

      B. Hech. 14:23; Fil. 1:1, debe haber ancianos y diáconos en cada congregación que reúnen los requisitos nombrados por el Espíritu Santo (1 Tim. 3; Tito 1).

      C. Hech. 20:17, 28, los ancianos son los obispos (supervisores) de la congregación.

      D. 1 Ped. 5:2, 3, son pastores de ese rebaño (una iglesia local).

      E. No hay gobierno central sobre varias congregaciones. En los primeros siglos después de Cristo y los apóstoles las iglesias abandonaron el patrón bíblico y formaron gobierno central y el resultado fue la apostasía total de aquellas iglesias.

IV. LA IGLESIA DE CRISTO SIGUE LA AUTORIDAD BÍBLICA.

      A. 1 Ped. 4:11, si alguno habla, hable conforme a la palabra de Dios. Hablar donde la Biblia habla y callar donde ésta calla. No agregarle, ni quitarle, no ponerle substitutos.

      B. 2 Tim. 1:13, retener o conservar el patrón bíblico en todas las cosas.

      C. Judas 3, contender por “la fe” que se ha revelado en la Escritura.

      D. 2 Jn. 9, no extraviarse de la doctrina de Cristo.

      E. Gál. 1:8, 9, si alguien predica otro evangelio, será condenado.

      CONCLUSIÓN.

      A.  Luc. 8:11, la simiente del reino es la palabra de Dios.

      B. Por eso, si sembramos la misma simiente (predicar el mismo evangelio) que fue sembrada en el primer siglo por los apóstoles, la “planta” será la misma iglesia.