¿Cómo honramos a Cristo? Juan 5:23
· Introducción.
· Honrar = reverenciar, venerar, adorar. Honrar a Cristo como honramos al Padre.
· 2 Ped. 1:17, “Porque al recibir de parte de Dios Padre honra y gloria, desde la grandiosa gloria le fue dirigida una voz: ‘Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia’”.
· Para los cristianos Cristo es “precioso”. 1 Ped. 2:7, “Para vosotros, pues, los que creéis, El es precioso”. Por eso, honramos a Cristo.
I. Honramos a Cristo al confesarle como Hijo de Dios.
· Mat. 16:16, “Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”. Jn. 11:27.
· Hech. 8:37, dijo el etíope: “Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios”. Esta confesión honra a Cristo. Lo exalta. Lo magnifica.
· Mat. 10:32, “todo el que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos”.
· Fil. 2:9-11, “Dios le exaltó hasta lo sumo, para que al nombre de Jesús se doble toda rodilla y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre”.
· ¿No quiere usted confesarle hoy mismo? Recuerde que todos le confesarán. ¿Usted quiere confesarle voluntaria o involuntariamente?
· No sea como los que sí creyeron pero por temor no lo confesaron, Jn. 12:42. ¿Qué tal usted? ¿Se preocupa por lo que otros piensen o digan? ¿Por qué no le confiesa?
II. El bautismo honra a Cristo.
· Mat. 28:19, “bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”. Mar. 16:16.
· El bautismo honra a Cristo porque refleja su muerte, Rom. 6:3, “¿no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte?”
· El bautismo honra a Cristo porque refleja su sepultura, Rom. 6:4, “Por tanto, hemos sido sepultados con El por medio del bautismo para muerte…”
· El bautismo honra a Cristo porque refleja su resurrección, Rom. 6:4, “como Cristo resucitó de entre los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida”.
· ¿Usted ha sido bautizado (sepultado) con Cristo para el perdón de sus pecados? ¿No quiere usted honrarle? Los que rehúsan esto, no le honran.
III. Ser añadido a su iglesia honra a Cristo.
· Hech. 2:47, “el Señor añadía cada día a la iglesia los que eran salvos” (los que obedecían el v. 38, arrepentirse y bautizarse para perdón de los pecados).
· Honramos a Cristo cuando adoramos a Dios como fieles miembros de la iglesia de Cristo: orar, cantar, enseñar/predicar, cena, ofrenda.
IV. Llevar el nombre de Cristo le honra.
· La iglesia pertenece a Cristo, es de El (Mat. 16:18; Hech. 20:28, “la iglesia del Señor, la cual adquirió para sí mediante su propia sangre”.
· Llevar el nombre “cristiano” honra a Cristo, Hech. 11:26; 1 Ped. 4:16, “si alguno padece como cristiano, no se avergüence; más bien, glorifique a Dios en este nombre”.
· Pero el llevar nombres humanos como católico, luterano, bautista, pentecostal, adventista, mormón, testigo, etc. honra algún hombre o alguna cosa, pero deshonra a Cristo.
V. Si imitamos y seguimos a Cristo, le honramos.
· Jn. 4:34 (hacer la voluntad del Padre); Mat. 20:28 (no ser servido, sino servir); Gál. 2:20 (Cristo vive en mí); 1 Ped. 2:21 (andar en sus pasos).
· Una mera profesión de ser “cristiano” no honra a Cristo. El cristiano es el que se niega a sí mismo, toma su cruz y sigue a Cristo cada día. No hay “cristiano apartado” o “cristiano infiel”.
· Honramos a Cristo siendo como El, compasivo, constante en la oración, obediente, servicial, dispuesto a perdonar. Como dice Hech. 10:38, “anduvo haciendo bien”.
· Honramos a Cristo siendo generosos, dadivosos, compartiendo (Efes. 4:28). Ofrendar según prosperado para ayudar a santos necesitados y evangelistas fieles (1 Cor. 16:2; Fil. 4:15, 16).
· Conclusión: Examine su vida. Pregúntese con sinceridad: ¿He honrado a Cristo? ¿Estoy honrándole ahora?
· ¿Ha honrado a Cristo confesando que El es el Hijo de Dios? Si no, ¿por qué no lo hace ahora mismo? Sin demorar. ¿Sabe usted que si no le confiesa lo está negando y despreciando?
· ¿Ha honrado a Cristo, siendo bautizado? Si no, aproveche la invitación. “Ven a Cristo, ven ahora”. Es para perdón y es para mostrar su fe en la muerte, sepultura y resurrección de Cristo.
· Honra a Cristo, siendo miembro de su iglesia, llevando su nombre, siguiéndole hasta la muerte.
· Luego usted ser honrado por El en el día final (Mateo 10:32, 33).