PARA PREDICAR A CRISTO ES NECESARIO PREDICAR SU DOCTRINA
INTRODUCCIÓN.
A. 1 Corintios 2:2, “Pues
me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a éste
crucificado”. Esto no quiere decir que el predicar a Cristo se limita a la
predicación de su crucifixión.
1. 2 Cor. 4:5, “Porque no nos predicamos a nosotros
mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por
amor de Jesús”.
2. Gál. 1:16, ”revelar a su Hijo en mí, para
que yo le predicase entre los gentiles”..
3. Col. 1:27, 28, “Cristo
en vosotros, la esperanza de gloria,
28 a quien
anunciamos…
4. Obviamente al hablar de predicar a Cristo Pablo
quiere decir predicar el evangelio de Cristo.
B. Es cierto que predicamos a Cristo cuando
predicamos su nacimiento de una virgen, sus atributos divinos, sus milagros, su
perfecta vida como ejemplo para nosotros, su compasión, su valentía, muerte,
resurrección y ascensión a la diestra de Dios “viviendo siempre para interceder”
por nosotros como nuestro perfecto Mediador (Sumo Sacerdote).
C. Sin embargo, predicar a Cristo incluye la
predicación de la doctrina de Cristo.
I. DURANTE DU VIDA TERRENAL CRISTO ESTABA ENSEÑANDO CONSTANTEMENTE.
A. Mat. 4:23, “Y
recorrió Jesús toda Galilea, enseñando
en las sinagogas de ellos, y predicando
el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el
pueblo”.
B. Mat. 5:1, 2,
“Viendo
la multitud, subió al monte; y sentándose, vinieron a él sus discípulos.
2 Y abriendo su boca les
enseñaba, diciendo:” y luego sigue el Sermón del Monte (capítulos 5, 6, 7).
C. Mat. 13:1-3,
“Aquel
día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar. 2 Y se le
juntó mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y
toda la gente estaba en la playa. 3 Y les
habló muchas cosas por parábolas”.
D. Mat. 21:23, “Cuando
vino al templo, los principales sacerdotes y los ancianos del pueblo se
acercaron a él mientras enseñaba”,
E. Mat. 26:25 “En
aquella hora dijo Jesús a la gente: ¿Como contra un ladrón habéis salido con
espadas y con palos para prenderme? Cada día me sentaba con vosotros
enseñando en el templo, y
no me prendisteis”.
F. En estos textos observamos que Jesús enseñó a una
multitud en el monte o junto al mar y en el templo, pero diariamente enseñaba a
muchas personas individualmente.
G. A través de los libros de Mateo, Marcos, Lucas y
Juan encontramos la enseñanza de Cristo sobre muchos temas. Los que enfatizan la
perfecta vida de Cristo sin enfatizar la perfecta enseñanza de Cristo simple y
sencillamente no predican a Cristo. Es imposible creer en Cristo sin creer en su
Palabra (su enseñanza, su doctrina).
II. LOS JUDÍOS SE ASOMBRABAN, SE MARAVILLABAN, SE ADMIRABAN DE LA ENSEÑANZA DE
JESÚS.
A. Luc. 2:47, cuando Jesús tenía apenas doce años de edad (v. 42) “aconteció
que tres días después le hallaron en el templo, sentado en medio de los doctores
de la ley, oyéndoles y preguntándoles. 47 Y todos los que le
oían, se maravillaban de su
inteligencia y de sus respuestas”.
B. Mateo 7:28, 29,
“Y
cuando terminó Jesús estas palabras (del Sermón del Monte), la gente
se admiraba de su doctrina;
29 porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los
escribas”.
C. Mar. 10:24-26 “Entonces Jesús, mirando alrededor,
dijo a sus discípulos: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que
tienen riquezas! 24 Los discípulos
se asombraron de sus palabras; pero
Jesús, respondiendo, volvió a decirles: Hijos, ¡cuán difícil les es entrar en el
reino de Dios, a los que confían en las riquezas! 25 Más fácil
es pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de
Dios. 26 Ellos se asombraban aun más, diciendo entre sí: ¿Quién, pues, podrá ser
salvo?”
1. Mat. 19:21, 22, “Jesús le dijo: Si quieres ser
perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el
cielo; y ven y sígueme. 22 Oyendo el joven esta palabra, se
fue triste, porque tenía muchas posesiones”.
2. 1 Tim. 6:7, 8
“nada
hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar. 8 Así
que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. 17-19 A
los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las
riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las
cosas en abundancia para que las disfrutemos. 18 Que hagan
bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; 19 atesorando
para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna”.
III. JESÚS DISCUTÍA CONSTANTEMENTE CON LOS PRINCIPALES SACERDOTES, ANCIANOS,
FARISEOS Y SADUCEOS, EXPONIENDO EL ERROR Y DEFENDIENDO LA VERDAD.
A.
Mat.
19:1-9, No les gustó la enseñanza de Jesús sobre el matrimonio y el repudio. “ Y
yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de
fornicación, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada,
adultera”.
B. Mat. 22:17, 21, Discutió con los fariseos sobre
los impuestos romanos, “queriendo tentar a Cristo le preguntaron: ‘Dinos,
pues, qué te parece: ¿Es lícito dar tributo a César, o no?’” Jesús contestó, “Mostradme
la moneda del tributo. Y ellos le presentaron un denario. 20 Entonces
les dijo: ¿De quién es esta imagen, y la inscripción? 21 Le
dijeron: De César. Y les dijo: Dad, pues, a César lo que es de César, y a Dios
lo que es de Dios”.
C. Mat. 22:23-33, Jesús discutió con los saduceos
sobre la resurrección. Hablaron de siete mujeres que se casaban, una tras otra,
con un hombre y preguntan “En la resurrección, pues, ¿de cuál de los siete será
ella mujer, ya que todos la tuvieron? Entonces respondiendo
Jesús, les dijo: Erráis, ignorando las Escrituras y el poder de Dios.
30 Porque en la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento,
sino serán como los ángeles de Dios en el cielo”.
D. Mat. 23 demuestra la insuperable valentía de
Jesús. Reprende duramente la hipocresía de los escribas y fariseos y en el cap.
24 profetizó la destrucción de Jerusalén.
IV. LA ENSEÑANZA DE CRISTO NO ES SIEMPRE FÁCIL Y POPULAR.
A. Uno de los mandamientos de Jesús que es súper
difícil para muchos de sus discípulos se encuentra en
Mat. 6:33,
“Mas
buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán
añadidas”.
1. Mat. 6:25, “No os afanéis por vuestra vida”; es
decir, por los medios de ganarse la vida.
2. Algunos suponen que es completamente justo y
justificable enseñar que el ganarse la vida puede y debe ocupar primer lugar en
la vida, que tiene prioridad sobre todo, incluyendo el asistir a los servicios
de la iglesia.
3. Hebreos
10:25, “no dejando de congregarnos”. Muchos hermanos creen que esta
exhortación significa “no dejando de congregarnos
con tal que no tengamos que trabajar”.
Aunque no participen de la cena del Señor el primer día de la semana se
justifican porque “todos saben que uno tiene que trabajar, quiera o no”. Y dicen
que es imposible cambiar de empleo porque ya tienen años en este empleo y su
mucho tiempo con la empresa les da ventajas y beneficios (preferencia). También
porque tienen compromisos y deudas y al comenzar en otro empleo van a ganar
mucho menos, etc.
4. Es decir, renunciar ese empleo sería como sacar
el ojo derecho o cortar la mano derecha. Por eso Jesús dice (Mateo 5:29, 30), “Por
tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues
mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea
echado al infierno. 30 Y si tu mano derecha te es ocasión de
caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus
miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno”.
5. Algunos argumentan que “no dejando
enkataleipo de congregarse”
significa “no abandonar la reunión completamente”; es decir, que esta
prohibición no se refiere al dejar de reunirse un domingo o dos cada mes para
trabajar, sólo que no abandone completamente las reuniones. Pero
la misma palabra
enkataleipo se usa en
Hebreos 13:5, Dios dice “No te
desampararé…”. Entonces, si está bien que uno
deja de reunirse
un domingo o dos cada mes, igualmente
está bien que Dios le desampare
un domingo o dos cada mes.
Hay que ser consecuentes. ¿Usted
quiere que Dios le desampare cada domingo que usted deja de reunirse con la
iglesia para participar de la cena y los demás actos de culto?
6. Si está bien dejar de congregarse
un domingo cada mes para trabajar,
¿puede dejar de congregarse dos domingos?
Si puede dejar de reunirse dos domingos cada mes, ¿puede dejar de reunirse
tres domingos? ¿Estará bien con Dios si asiste a los reuniones
solamente una vez al mes? Si usted
contesta que “no”, ¿qué texto usa para contestar?
7.
Sería exagerada insensatez decir que vale la pena quedarse
con su empleo aunque le lleve al fuego del infierno.
B. Igualmente muchos han tropezado en la enseñanza
de Cristo en Mateo 19:9, “Y yo os
digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación y se
casa con otra, adultera, y el que se casa con la repudiada, adultera”.
1. Lamentablemente hay muchas parejas que se han
separado de sus cónyuges originales no por causa de fornicación y se han casado
otra vez y, por eso, están cometiendo adulterio, pero siguen en esa unión
ilícita pensando que es demasiado difícil dejarla.
2. Según Mat.
19:10, los discípulos de Cristo tuvieron problemas con
esta enseñanza. “Le dijeron sus discípulos: Si así es la condición del hombre
con su mujer, no conviene casarse”.
3. Otra vez es necesario recordar
Mat. 5:29-30, “Por
tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues
mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea
echado al infierno. 30 Y si tu mano derecha te es ocasión de
caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus
miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno”.
4. Igualmente
sería exagerada insensatez decir que vale la pena quedarse en una unión ilícita
(adulterio) aunque les lleve al fuego del infierno.
C. Otra enseñanza de Jesús que no es nada popular se
encuentra en Lucas 14:26, 27, “Si
alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y
hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo.
27 Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede
ser mi discípulo”.
1. El texto no relata la reacción de la gente a esta
enseñanza pero sin duda era semejante a su reacción a las otras enseñanzas que
claramente exaltan a Cristo al primer lugar en nuestra vida.
2. Cristo enseña enfáticamente que El tiene que ser
PRIMERO en Lucas 9:57-62, “Yendo
ellos, uno le dijo en el camino: Señor, te seguiré adondequiera que vayas.
58 Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los
cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza.
59 Y dijo a otro: Sígueme. Él le dijo: Señor, déjame que primero vaya
y entierre a mi padre. 60 Jesús le dijo: Deja que los muertos
entierren a sus muertos; y tú ve, y anuncia el reino de Dios. 61 Entonces
también dijo otro: Te seguiré, Señor; pero déjame que me despida primero de los
que están en mi casa. 62 Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo
su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios”.
D. Mat. 16:18,
“edificaré mi iglesia”. Cristo
prometió edificar su iglesia y lo hizo el día de Pentecostés (Hechos 2).
Hechos 2:47 dice que el Señor añadía cada día a
la iglesia los que habían de ser
salvos”. Ese día la iglesia quedó establecida y
es la única iglesia de la cual leemos en la Biblia. Pablo dice en
Rom. 16:16 “os saludan todas las iglesias
de Cristo” (no habla de denominaciones sino de las varias
congregaciones que él y sus
compañeros habían establecido).
Pero
a través de los siglos varios hombres y mujeres han establecido iglesias que
profesan ser de la religión de Cristo. Tienen su propio nombre, doctrina, culto,
organización, obra, abusando de textos bíblicos para dar aparente apoyo a su
religión humana. Para ellos Mateo 16:18 no tiene importancia alguna.
E. Marcos
16:16, “el que crea y sea bautizado
será salvo”. Este texto está rotundamente rechazado por muchos maestros
religiosos. Es otra enseñanza de Cristo nada popular con iglesias humanas.
Igualmente Hechos 2:38, “Pedro
les dijo: Arrepentíos, y bautícese
cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y
recibiréis el don del Espíritu Santo”. Esta es enseñanza de Cristo revelada por
el Espíritu Santo a los apóstoles (Juan 14:26; 16:13).
CONCLUSIÓN.
A. 2 Juan 9 bien dice, “Cualquiera
que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina
de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo”.
B. Jesús mismo dijo acerca de su palabra
(enseñanza), Jn. 12:48, “El que me rechaza, y no recibe
mis palabras, tiene quien le juzgue; la
palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero”.
C. Para mucha gente el nombre “Jesús” es nombre
precioso. Les gusta hablar de Cristo. Les gusta cantar himnos alabando a Cristo.
Desde luego, debemos exaltar y honrar a Cristo por su Deidad y por todo lo que
hecho por nosotros.
D. Sin embargo, todo esto no lleva peso alguno
si no
aprendemos, aceptamos y obedecemos su doctrina (enseñanza).
E. Cristo mismo, hablando de su
doctrina, dice “estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida,
y pocos son los que la hallan” (Mat. 7:14). Como ya dijimos dos veces en este
estudio, la práctica de ciertas enseñanzas de Cristo requieren sacrificios
comparables al cortar la mano derecha y sacar el ojo derecho.
F. Pero los caminos de Cristo son los caminos de
Dios y, por lo tanto, son los caminos perfectos (Isaías 55:8, 9). Cristo nos
invita a aceptarlos. Mat. 11:28-30, “Venid a mí todos los que estáis trabajados
y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de
mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras
almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga”.
Sí, a pesar de todo
lo difícil de la enseñanza de Cristo es un yugo fácil y ligero cuando comparado
con el yugo de Satanás que lleva al eterno fuego del infierno.