LA “AVARICIA, QUE  ES IDOLATRÍA”

 

I. Definiciones de “avaricia”.

          A. pleonexia, codicia o avaricia; deseo de tener más, ansioso de posesiones. Deseo de tener más que el mero “sustento y abrigo” (1 Timoteo 6:8), lo suficiente para la vida normal. Es el deseo de tener más dinero y bienes materiales de lo que se requieren para satisfacer las necesidades normales de la vida.

          B. Codicia: Fijar el deseo sobre. Codicioso = avaro. Son gemelos.

          C. Materialismo: Tendencia a dar importancia primordial a los intereses materiales.

                     

II. Obra de la carne, idolatría.

          A. Colosenses 3:5, “Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría”.

          B. 1 Tesalonicenses 2:5, “Porque nunca usamos de palabras lisonjeras, como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es testigo … v. 9  Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios”.

          C. 1 Cor. 5:11, no tener comunión con avaros. “Os escribí que no os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón; con el tal ni aun comáis”.

          D. 1 Tim. 3:2,3, “es necesario que el obispo sea irreprensible … no codicioso de ganancias deshonestas … no avaro”.

          E. 2 Pedro 2:1-3, “por avaricia harán mercadería de vosotros”. Falsos hermanos, abusan de esta bendición, se aprovechan de hermanos humildes y generosos. (Aun el imponer el diezmo es abuso porque era de la ley de Moisés que fue clavada en la cruz, Colosenses 2:14).

          F. Marcos 7:21-23, “Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, 22 los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez. 23 Todas estas maldades de dentro salen, ycontaminan al hombre”.

          G. 1 Corintios 10:6, “Mas estas cosas sucedieron como ejemplos para nosotros, para que no codiciemos cosas malas, como ellos codiciaron”.

 

III. Ejemplos.

          A. Eva. Génesis 3:6, “Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella”.

          B. Acán. Josué 7:21, “Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello”.

          C. David. 2 Samuel 11:2-4, “Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa. Envió David a preguntar por aquella mujer, y le dijeron: Aquella es Betsabé hija de Eliam, mujer de Urías heteo. Y envió David mensajeros, y la tomó; y vino a él, y él durmió con ella. Luego ella se purificó de su inmundicia, y se volvió a su casa”.

          D. Fariseos. Lucas 16:14, “Y oían también todas estas cosas los fariseos, que eran avaros, y se burlaban de él”.

          E. El rico necio. Lucas 12:12-21, “Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee16 También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. 17 Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? 18 Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; 19 y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. 20 Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? 21 Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios”.

                   1. Este rico necio es perfecto ejemplo de la avaricia. Obsérvese que usa mucho el pronombre personal (haré, mis, derribaré, edificaré, diré a mi alma, etc.)..

                   2. En realidad había muchos lugares donde guardar sus bienes porque hay muchos necesitados.

                   3. Dijo “mi alma” pero Dios le dice “esta noche vienen a pedirte tu alma”; es decir, a fin de cuentas, pertenece a Dios.

                   4. Dijo que tenía bienes “para muchos años” pero Dios le dice, “esta noche vienen a pedirte tu alma”.

                   5. Dijo “mis graneros, frutos, bienes” pero al entregar su alma ¿de quién eran sus bienes?

          F. Judas. Mateo 26:15, “Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes, 15 y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le asignaron treinta piezas de plata”.

          G. Ananías y Safira. Hechos 5:1-3, “Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una heredad, y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles. Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad?”

 

IV. Negocios, profesiones y empleos que evitan que uno adore a Dios en la iglesia (Efesios 3:21), participando de la cena del Señor (1 Cor. 11:24) y los demás actos de culto el primer día de la semana (Hechos 20:7; 1 Cor. 16:1, 2).

          A. Uno que dice “No pude asistir el domingo porque tuve que trabajar” no toma en cuenta que esta es otra forma de avaricia, el amor al dinero. ¿Por qué trabajar? Obviamente es para ganar dinero y si uno pone esto en primer lugar desobedece Mateo 6:33 de buscar primeramente el reino de Dios.

                   1. Se dice “Hay que trabajar para comer.” Dios nos da 168 horas de vida cada semana. De esas 168 horas ¿es imposible apartar tiempo el primer día de la semana para adorar a Dios? Si lo hacemos, ¿vamos a morir de hambre?

                   2. Mateo 6:24-34. En este texto Cristo enseña que sus discípulos pueden buscar primeramente el reino de Dios (y esto ciertamente incluye la adoración de Dios en la iglesia el primer día de la semana) y al mismo tiempo tener lo necesario para el alimento y el abrigo.

                   3. En este texto el “Mamón” (riquezas) obviamente se refiere a lo que es más que alimento y abrigo. Los ricos son los que tienen más de lo que es suficiente o necesario de los bienes de este mundo para una vida normal.

                   4. Compárese 1 Tim. 6:8, “teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto” y luego habla en el mismo texto (v. 17, 18) de los ricos, los que tienen más que lo suficiente o lo necesario para satisfacer sus necesidades normales y lo que deben hacer con sus riquezas: “Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna”.

                   5. ¿De qué consiste el “sustento y abrigo”? Cada cristiano, con su Biblia y oración, decide esto.

          B. Hay tendencias entre algunos hermanos de pensar que si uno “tiene que trabajar”, el no asistir a la reunión de la iglesia el domingo es justificable, pero ¿qué texto bíblico enseña tal cosa?  Es imposible armonizar esto con Mateo 6:33, “Buscad primeramente el reino de Dios” y Hebreos 10:25, “no dejando de congregarnos”. Estos textos no dicen, “a menos que tenga que trabajar”.

          C. Los que dicen que simple y sencillamente no pueden hacer arreglos en el empleo o negocio para poder asistir al servicio de adoración el domingo deben reconocer que no son los únicos que están obligados a hacer cambios radicales en su vida. ¿Qué dirían ellos a los que piensan que están bien en su matrimonio pero que en realidad son adúlteros según Mateo 5:32; 19:9, “Cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación y se casa con otra, adultera…”? Si uno puede hacer caso omiso de Hebreos 10:25, entonces puede hacer caso omiso también de Mateo 19:9.

          E. Es indispensable que se entienda que la avaricia es otra adicción más, como la adicción a drogas, alcohol, nicotina, pornografía, porque es lo que consume a uno, es lo primero en su vida. Tiene prioridad sobre la familia, la iglesia y Dios mismo. No se puede negar que para mucha gente el trabajo o el negocio ocupan el primer lugar en su vida y, por eso, son su dios. ¿Por qué dedican tantas horas al trabajo o negocio o profesión si no es para ganar dinero?

          F. También se piensa que está bien faltar “de vez en cuando”, “cuando hay emergencia (o urgencia)”. “Soy médico, enfermera, bombero, mi trabajo es 24/7”. ¿Qué pues? ¿Son cristianos especiales que no tienen que adorar a Dios?

          El problema en esto es que al aceptar cierto empleo o negocio ellos saben de antemano que por lo menos “de vez en cuando” ese empleo o negocio les obligarán a faltar, y sabiendo esto, de todos modos lo aceptan. Es rechazo automático de Mateo 6:33.

          Decisiones tienen consecuencias.

 

V. Reconocer que es necesario hacer sacrificios (llevar su cruz) para ser discípulo de Cristo.

          A. Mateo 16:24, “Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame”. Si se niega a sí mismo, acabará con todo aspecto de la avaricia y toda obra de la carne (Gálatas 5:19-21).

          B. Mateo 5:29, 30,  “Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. 30 Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno”.

                   1. ¿El ojo derecho y la mano derecha representan qué? Algo que para uno es muy precioso, muy deseable, muy importante, pero que puede hacerle pecar y caer.

                   2. Seguramente incluye la idolatría y Pablo dice que la avaricia (el amor al dinero y posesiones materiales) es idolatría porque ocupa primer lugar en la vida.

          C. Puerta estrecha. Mateo 7:13, 14, “Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; 14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan”.

                   1. Esta enseñanza indica lo difícil de ser discípulo de Cristo. No hay texto alguno que diga que es fácil ser cristiano. Sobre todo esto quiere decir que debemos poner a Cristo y la iglesia en primer lugar en nuestra vida.

                   2. Esta sencilla enseñanza pone fin a las obras de la carne, incluyendo la avaricia.

          D.      Lucas 16:28, Cristo nos enseña que debemos “calcular gastos”; es decir, estudiar con cuidado lo que significa ser cristiano y decidir si en realidad queremos pagar el precio.

 

VI. Para eliminar la avaricia debemos ofrendar generosamente, ayudar a los hermanos necesitados y apoyar a los evangelistas fieles.

          A. 2 Cor. 8:1-5, “Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia; que en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. Pues doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzaspidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos. Y no como lo esperábamos, sino que a sí mismos se dieron primeramente al Señor, y luego a nosotros por la voluntad de Dios”. Estos hermanos se habían alejado completamente de la avaricia. Son muy buenos ejemplos para nosotros.

          B. Efesios 4:28, “El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad”. Aparte de la ofrenda de la iglesia, como individuos podemos compartir con hermanos necesitados. Hermanos que hagan esto no están en mucho peligro de ser avaros.

          C. Gálatas 6:10, “Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe”.

          D. 1 Juan 3:17, 18, “Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? 18 Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad”.

          E. Mateo 25:31-46, Cristo dice que si ayudamos a los hermanos le ayudamos a Él mismo: “en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis”.

          F. Tito 2:14, Cristo “se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras… 3:1 Recuérdales que… estén dispuestos a toda buena obra… 3:8  que los que creen en Dios procuren ocuparse en buenas obras… 3:14  Y aprendan también los nuestros a ocuparse en buenas obras para los casos de necesidad, para que no sean sin fruto”. Si nos ocupamos en buenas obras, venceremos la avaricia.

          G. 1 Timoteo 6:17, 18 “A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.  Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos”. ¿Quiénes son los ricos? Los que tienen más que el mero “sustento y abrigo”.

           H. Si obedecemos estos textos la avaricia no será problema para nosotros.

         

Conclusión.

          A. Si no borramos toda forma de avaricia del corazón, este ídolo nos destruirá. Mateo 13:22, “El que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra, pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa”. Jesús habla del “engaño de las riquezas” porque prometen mucho pero no cumplen. Es puro engaño.

          B. 1 Timoteo 6:6-11, “el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores”.

          C. Romanos 1:28-32, Pablo incluye la avaricia entre otros pecados de los que “no aprobaron tomar en cuenta a Dios” y concluye diciendo que “son dignos de muerte”.

          D. Efes. 5:3-6, Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos; ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias. Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios. Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia”.

          E. Recordemos siempre que este estudio tiene que ver con el Juicio Final, con la Vida Eterna y con el castigo eterno en el Infierno de Fuego.

          Por lo tanto, conviene, vale la pena, hacer todo lo que sea necesario para estar bien con Dios para salvos en Aquel Día.