LOS ARGUMENTOS DE PABLO A
FAVOR DE “RECIBIR” Y EN CONTRA DE “JUZGAR” LOS UNOS A LOS OTROS
ROMANOS 14 Y 15
INTRODUCCIÓN.
-- 14:1, Recibir;
14:3, No menospreciar; 15:1, Soportar; 15:7, Recibir los unos a los
otros. Compárese Filemón 12, 17.
-- 14:3, No juzgar
-- 14:13, No poner tropiezo
-- 14:19, Sigamos lo que contribuye a la paz, y a la mutua
edificación.
ARGUMENTO UNO:
-- 14:3, No menospreciar
a su hermano porque Dios le ha recibido.
--
¿De
veras queremos menospreciar al hermano que Dios recibe? Dios no le menosprecia.
Más bien, lo recibe, lo acepta.
-- Si nuestro hermano tiene plena comunión con Dios, ¿no
queremos tener plena comunión con él nosotros?
ARGUMENTO DOS:
-- 14:4, No debemos
juzgar al siervo ajeno.
-- Nuestro hermano no es siervo nuestro. No somos dueños de
él. No lo compramos. No morimos para salvarle.
-- Más bien, es siervo de Cristo. Pertenece a Cristo,
Hechos 20:28; 1 Corintios 6:19, 20.
-- Para su propio señor está en pie, o cae; pero estará
firme, porque poderoso es el Señor para hacerle estar firme. No somos poderosos
para hacerle estar firme, pero Cristo lo es.
ARGUMENTO TRES:
-- 14:9, Cristo está sumamente calificado para ser
Señor y Juez. Para esto
murió y resucitó, y volvió a vivir, para ser Señor así de los muertos como de
los que viven.
-- No estamos calificados para ser señor y juez del hermano
porque no morimos y resucitamos para calificarnos.
-- 14:10, Además, no solamente algún hermano sino todos
compareceremos ante el tribunal de Cristo. 2 Corintios 5:10.
-- Entonces, ¿por qué juzgamos o menospreciamos a nuestro
hermano, sabiendo que todos seremos juzgados por Cristo?
-- 14:3, No conviene tener más alto concepto de sí que el
que debe tener.
ARGUMENTO CUATRO:
-- 14:13, No poner tropiezo (ocasión de caer) al hermano.
-- 14:15, No obrar en contra de la muerte de Cristo.
Él murió por el hermano débil y lo puede salvar, es poderoso para hacerle estar
firme, pero no hagamos nada en contra del esfuerzo de Cristo para salvarle.
Seguramente no queremos hacer tal cosa.
-- Mateo 18:6,
Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños
que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino
de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar”. No habla de niños sino de
personas que han llegado a ser como niños. Son humildes, les faltan conocimiento
y experiencia pero tienen hambre y sed de justicia y quieren crecer.
-- Hay gran peligro aquí. Hermanos que tengan tiempo en la
iglesia y se sientan fuertes pueden decir o hacer algo que confunda o desanime a
los más nuevos y aun causar su caída, su retorno al mundo. El juicio de Cristo
será severo contra los tales.
-- Algunos hermanos son muy sensibles, se dejan llevar por
los sentimientos. Es muy fácil lastimar sentimientos y causar tropiezos.
--
Santiago 3:2, Si alguno no ofende en palabra, éste es varón
perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo … 3:6, La lengua es un fuego,
un mundo de maldad … 4:11, Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. 5:9,
Hermanos, no os quejéis unos contra otros.
-- 1 Pedro
3:10, El que quiere amar la vida y ver días buenos, refrene su lengua de mal, y
sus labios no hablen engaño.
-- 1 Timoteo 5:13, Pablo habla de viudas jóvenes que
aprenden a ser chismosas y entremetidas, hablando lo que no debieran. Pero estas
no son los únicos miembros que puedan caer en esta práctica maliciosa. El
celular presenta una tentación muy atractiva para promover tal práctica.
-- -- Gálatas 6:1, 2,
“Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta,
vosotros que sois espirituales restauradle con espíritu de mansedumbre,
considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado. Sobrellevad los
unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”. De esta manera
cooperamos con la verdad. Con esto edificamos en lugar de destruir la obra de
Dios con lengua suelta.
ARGUMENTO
CINCO:
-- 15:2, 3 No agradar a sí mismo. Imitar a Cristo,
en lugar de agradar a si mismo Cristo sufrió todos los vituperios de Satanás,
toda forma de humillación, difamación, reproches y desprecio. Le azotaron, le
escupieron, la pusieron una corona de espinas y clavó sus manos y pies a una
cruz romana.
-- ¡Qué ejemplo de no agradar a sí mismo! ¿Y nosotros no
podemos practicar la abnegación de sí para edificar y salvar al hermano por
quien Cristo sufrió tanto?
-- 1 Corintios 9:20-23, la abnegación de Pablo, no se
agradó a sí mismo.
--
Por lo tanto, en
lugar de criticar o difamar al hermano, para agradar y satisfacer el apetito
carnal, nos conviene agradar al hermano “en lo que es bueno, para
edificación”.
- 1 Timoteo 6:4
incluye “las malas sospechas” en la lista con “envidias, pleitos, blasfemias”.
-- LA PRUEBA:
Antes de repetir alguna crítica o acusación contra algún hermano, pregúntese
primero, ¿Estoy seguro que es verdad?” Y luego otra pregunta: “¿Será provechoso
o beneficioso si la repito? ¿Con qué propósito repetimos cosas negativas que
escuchemos contra el hermano?
-- Mateo 7:17,
¿Queremos que otros nos traten como les tratamos a ellos?
--
Romanos 13:14, “No proveáis para los deseos de la carne”.
Esto es precisamente lo que hacemos cuando repetimos “lo que se dice” en contra
de algún hermano. Satisface el apetito carnal.
ARGUMENTO
SEIS:
-- 14:20,
No destruyas la obra de Dios.
-- 1:16, El evangelio es el poder de Dios para salvación.
-- Y nos conviene hacer todo lo posible por contribuir a la
paz y mutua edificación, sin poner tropiezos ni causar el más mínimo desaliento
entre hermanos débiles.
-- 1 Tesalonicenses 5:14, Alentar a los de poco ánimo,
sostener a los débiles, ser pacientes con todos, porque haciendo esto
apoyamos la obra redentora de Cristo y toda la obra de Dios para salvarnos.
CONCLUSIÓN:
-- 14:1, Recibir;
14:3, No menospreciar; 15:1, Soportar; 15:7, Recibir los unos a los
otros. Compárese Filemón 12, 17 … 14:3, No juzgar … 14:13, No poner tropiezo …
14:19, Sigamos lo que contribuye a la paz, y a la mutua edificación.
-- PORQUE: Dios le ha recibido … No debe juzgar al siervo
ajeno … Solamente Cristo está calificado para ser Señor y Juez … No debe poner
tropiezo delante de su hermano … No debe agradar a sí mismo … No debe destruir
la obra de Dios.