“LOS MIEMBROS TODOS SE PREOCUPEN LOS UNOS POR LOS OTROS”

1 CORINTIOS 12:12-28

INTRODUCCIÓN.

   --- 1 Corintios 12:12 - La iglesia de Cristo es el cuerpo de Cristo. Como el cuerpo físico tiene muchos miembros, todos diferentes y cada uno con su función, así también el cuerpo de Cristo tiene muchos miembros, todos diferentes y cada uno con su función. Cuando todos los miembros del cuerpo físico están funcionando, el cuerpo queda bien coordinado y funciona de acuerdo a la voluntad de Dios. Asimismo el cuerpo de Cristo funciona y lleva a cabo la obra que Dios le da cuando todos los miembros están funcionando. Pablo enfatiza que “muchos” son “uno”.

   --- 1 Corintios 12:13 – “Fuimos todos bautizados en un cuerpo”. Esto equivale a Hechos 2:47, los bautizados fueron salvos y añadidos a la iglesia de Cristo. Aunque perseguidos “iban por todas partes anunciando el evangelio (Hechos 8:4).

   --- 1 Corintios 12:14-17 – Todo miembro -- hombre o mujer, adulto, anciano o joven, rico o pobre --  TODOS Y CADA UNO son importantes y tienen funciones importantes para que el cuerpo funcione de acuerdo a la voluntad del Señor. Que nadie cuestione la importancia de su propia membresía. Ningún miembro debe desear ser otra clase de miembro con otra función.

   --- 1 Corintios 12:18 – “Mas ahora Dios ha colocado los miembros cada uno de ellos en el cuerpo, como Él quiso”. V. 28, “Y a unos puso Dios en la iglesia”. ¡Pensamiento solemne! DIOS coloca cada miembro en su lugar en el cuerpo y requiere que funcione para el provecho del cuerpo. ¡No conviene menospreciar lo que DIOS hace! Cada miembro cuenta.

   --- 1 Corintios 12:20 – Muchos – uno solo. Los “muchos” miembros, todos diferentes como los miembros del cuerpo físico son diferentes, funcionan como un solo cuerpo, bien coordinados, unidos en perfecta armonía para la edificación del cuerpo y para llevar a cabo la obra del Señor.

   --- 1 Corintios 12:21 – Ningún miembro sobra. Es indispensable que cada miembro tenga en alta estima a los demás miembros.

   --- 1 Corintios 12:22 – Los miembros más débiles probablemente se refiere a los miembros vitales que se llaman “débiles” porque están protegidos dentro del cuerpo. Desde luego, la palabra “débil” no se aplica en ningún sentido a la función de estos órganos porque sin la “obra” de ellos el cuerpo muere.

   --- 1 Corintios 12:23,  24 – Lo mismo se puede decir de los miembros menos decorosos. El pensamiento en todo esto es que en la iglesia todo miembro cuenta porque todo miembro tiene función importante.

POR LO TANTO, QUE TODOS LOS MIEMBROS SE PREOCUPEN LOS UNOS POR LOS OTROS.

   --- 1 Corintios 12:25, 26, “Que los miembros todos se preocupen los unos por los otros … si un miembro padece,  todos los miembros se duelen con él”. Así es con el cuerpo físico y así debe ser con el cuerpo espiritual de Cristo. “Y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan”. ¿CÓMO DEMOSTRAR ESTA PREOCUPACIÓN LOS UNOS POR LOS OTROS? Si algún miembro pregunta, “¿Qué puedo hacer? ¿Cuál es la función mía en la iglesia? debe obedecer los siguientes mandamientos que son para cada miembro de la iglesia.

   --- RECIBIR (ACEPTAR) LOS UNOS A LOS OTROS. Romanos 15:7 – “Por tanto, aceptaos los unos a los otros, como también Cristo nos aceptó para la gloria de Dios” (La Biblia de Las Américas). Todos los miembros de la congregación han obedecido al evangelio de Cristo, siendo bautizados en un cuerpo. Todo miembro debe conocer y aceptar a los demás miembros. Somos familia, hermanos y hermanas en Cristo. Para aceptarlos es necesario conocerlos. Los miembros de la congregación deben conocer los unos a los otros.

   --- QUE OS AMÉIS LOS  Juan 13:35, “En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros”. Este amor debe ser el amor agapao, el amor de buena voluntad y también el amor fileo, el amor o afecto de familia. Romanos 12:10, “Sed afectuosos unos con otros con amor fraternal” (LBLA).

   --- NO DEJAR DE CONGREGARSE.  Hebreos 10:24, 25, “Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; ²⁵ no dejando de congregarnos…” Cada miembro debe considerar (tomar en cuenta) la condición de los demás miembros y buscar la manera de estimularlos al amor y a las buenas obras. ¿Cómo lo hace? “No dejando de congregarnos”. Por medio de la asistencia fiel a los servicios de la iglesia los miembros estimulan y animan los unos a los otros. La banca vacía desanima a los presentes.

   --- SALUDAOS LOS UNOS A LOS OTROS CON BESO SANTO, Romanos 16:16, 1 Corintios 16:20; 2 Corintios 13:12; 1 Tesalonicenses 5:26; 1 Pedro 5:14. Saludar. Aspazomai, “significa literalmente atraer a uno; de ahí saludar, dar la bienvenida… También significa despedirse… Un saludo o una despedida se hacían generalmente con abrazos y besos” (Vine Diccionario Expositivo). Al saludarse los unos a los otros los hermanos de la iglesia indican que aceptan y aman los unos a los otros. Hechos 20:1, “habiéndolos exhortado y abrazado, se despidió y salió”. Hechos 21:6, “Y abrazándolos los unos a los otros, subimos al barco y ellos se volvieron a sus casas”.

   --- “Saludar” no es simplemente un consejo bonito. No es una mera sugerencia. ES MANDAMIENTO. Es algo que todo miembro puede y debe hacer. Es una función importante de cada miembro de la congregación. Requiere no solamente la puntualidad, sino que lleguen con tiempo para saludar los unos a los otros. Miembros que lleguen tarde a la reunión no pueden saludar. El saludar bíblico requiere tiempo (Lucas 10:4) y es de suma importancia.

   --- EXHORTAR, AMONESTAR, ANIMAR, SOSTENER. 1 Tesalonicenses 5:14, exhortar a los “ociosos” (desordenados, perezosos), animar a los desalentados, sostener a los débiles y ser pacientes con todos. ¿Quiénes deben hacer esto? ¿Solamente el evangelista y los ancianos? Más bien, es MANDAMIENTO Y ES PARA CADA MIEMBRO DE LA IGLESIA. Amado hermano, hermana, ¿usted quiere saber lo que usted puede hacer como miembro de la iglesia? Leer con cuidado estos textos entendiendo que son mandamientos para usted mismo(a). Hebreos 3:13, “Exhortaos los unos a los otros cada día”. ¿Quién o quiénes deben hacer esto? ¿Solamente el predicador y los ancianos? Es obvio que estas instrucciones son para todo miembro de la iglesia. Todos deben preocuparse los unos por los otros y mostrar ese amor exhortando y amonestando cuando sea necesario. Todo miembro – hombre, mujer, adulto, anciano, joven – puede y debe hacer esto.

   --- AMONESTAR. Romanos 15:14, “Pero estoy seguro de vosotros, hermanos míos, de que vosotros mismos estáis llenos de bondad, llenos de todo conocimiento, de tal manera que podéis amonestaros los unos a los otros”. “Amonestar” lleva la idea de advertir, como dice Pablo en 2 Corintios 5:10, 11, después de hablar del juicio final dice, “Conociendo, pues, el temor del Señor, persuadimos a los hombres”. Es muy apropiado hablar del juicio y del castigo eterno con los que son “ociosos” (perezosos, negligentes, descuidados) con respecto a los servicios de la iglesia y la obra del Señor en general.

   --- OJO: Una sugerencia. Si pensamos que la exhortación o amonestación puede ser ofensiva y causar reacción negativa, tal vez sería mejor dejar que ellos se juzguen a sí mismos. Por ejemplo, sugerir que ellos lean cierto texto y preguntarles qué piensan.

   --- SERVIR. Gálatas 5:13, “Servíos por amor los unos a los otros”. ¿Cómo “servir”? Al obedecer estos mismos mandamientos estamos “sirviendo” a los hermanos y es el servicio más importante.

   --- RESTAURAR. Sobrellevar las cargas. Gálatas 6:1, “Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado. 2. Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y cumplid así la ley de Cristo”. Para obedecer este mandamiento de “restaurar” al hermano que no asiste a los servicios fielmente o tiene otras faltas, primero son necesarios los otros mandamientos que estamos estudiando: exhortar, amonestar, animar, etc. El restaurar es mandamiento para todo miembro y no solamente para los ancianos y el evangelista. Todo miembro puede participar en este esfuerzo y lo que cada miembro hace cuenta, es de suma importancia.

   --- OJO: A veces es necesario practicar la disciplina de 1 Corintios 5, pero ni hablar de ese texto a menos que la membresía haya trabajado diligentemente para restaurar al hermano caído. Dice Pablo que “los espirituales” deben hacerlo. ¿No son espirituales todos los miembros? Si hay miembros que no son espirituales, ¿qué son? ¡Carnales! ¿Y los carnales deben estar restaurando al hermano caído? Más bien, ellos mismos necesitan ser exhortados y restaurados.

   --- PERDONAR. Efesios 4:32, “Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo”. Perdonar y recibir (aceptar).

   --- SOPORTAR, SOSTENER. Efesios 4:2, “con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor”. 1 Tesalonicenses 5:14, “También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.

CONCLUSIÓN:

   --- AL OBEDECER ESTOS MANDAMIENTOS (exhortar, amonestar, animar, restaurar, perdonar, sostener, etc.) los miembros demuestran el amor (afecto) fraternal, y que se preocupan los unos por los otros. Pero es indispensable que todo miembro recuerde que estos mandamientos son para cada miembro y no solamente para los ancianos y el evangelista. Al obedecer estos mandamientos nunca pensarán que son inútiles en la iglesia, que su membresía no cuenta, que no son importantes. Nunca estarán anhelando ser y hacer como otro hermano, sino que estarán contentos con el don que Dios le ha dado.

   --- EFESIOS 4:11-16, “ Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, ¹² a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, ¹³ hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; ¹⁴ para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, ¹⁵ sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, ¹⁶ de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor”.