Jesús confirma la historia del Antiguo Testamento

          Algunos aceptan el Nuevo Testamento, pero dicen que muchos relatos del Antiguo Testamento son leyendas judías o pura mitología. Jesucristo, sin embargo, confirma la historia del Antiguo Testamento. Por lo tanto, los que ponen en tela de juicio los relatos del Antiguo Testamento también dudan de la veracidad de nuestro Señor Jesucristo.

          Por ejemplo, dice Jesús (Mateo 19:4), "¿No habéis leído que el que los hizo al principio, varón y hembra los hizo?" Al decir esto Jesús confirma el relato de Génesis 1 y 2 de la creación del hombre. Los que enseñan la evolución del hombre no solamente niegan el relato de Génesis 1 y 2, sino también las palabras de Cristo Jesús. Génesis 2:22 dice, "Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer"; algunos hacen broma de esto, pero obsérvese que Jesús dice, "varón y hembra los hizo", de esta manera confirmando la creación de la mujer.

          Para Jesús el diluvio (Génesis 6-9) fue un evento histórico. El dice, (Mateo 24:37,38), "Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre. Porque en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre". Por eso, si alguno dice que el diluvio es ficción, niegan la palabra de nuestro Señor Jesucristo.

          Según Génesis 19:24 el Señor "hizo llover sobre Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego" porque eran homosexuales como se ve claramente en la primera parte del capítulo 19. "Y llamaron a Lot, y le dijeron: ¿Dónde están los hombres que vinieron a ti esta noche? Sácalos para que los conozcamos"; es decir, tener relaciones sexuales con ellos. Sodomía quiere decir homosexualismo. Jesucristo habla de la destrucción de Sodoma como historia. Al hablar a los de Capernáum dijo que "si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy" (Mateo 11:23). También dice, "Acordaos de la mujer de Lot" (Lucas 17:32; Génesis 19:26).

          Jesús no habla de Jonás como personaje ficticio, sino histórico. "Como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches" (Mateo 12:40). Como Jesús literalmente estuvo en el sepulcro, así también Jonás literalmente estuvo en el vientre del gran pez.

          Al denunciar a los que les perseguían, el Señor dijo, "para que venga sobre vosotros toda la sangre justa que se ha derramado sobre la tierra, desde la sangre de Abel el justo hasta la sangre de Zacarías" (Mateo 23:35); de esta manera confirma el relato de Génesis 4:8 acerca de la muerte de Abel.

          Estos textos en los que Jesús confirma los relatos históricos del Antiguo Testamento son importantísimos, porque todos deben creer esta historia que revela las obras tan poderosas y maravillosas de Dios a través de los años. La historia de los grandes personajes como Noé, Abraham, Moisés, David y otros produce fe en Dios y nos proporcionan ejemplos que seguir.

          El escritor de la carta a los Hebreos dice (11:6) que "sin fe es imposible agradar a Dios", y habla de muchas personas (hombres y mujeres) de los tiempos antiguos que eran fieles a Dios, porque su buen ejemplo produce fe en nosotros.

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