“Cerca de Ti, Señor”

 

v  Introducción. El anhelo de todo cristiano. Varios himnos que lo expresan. Sal. 73:28, “estar cerca de Dios es mi bien”.

v  “Él no está lejos de ninguno de nosotros”, Hech. 17:27. V. 28, “porque en Él vivimos, nos movemos y somos”.

v  Porque Dios es omnipresente. Su presencia llena el universo. 1 Rey 8:27; Sal. 139:7, 8, 12… Por eso, “no está lejos…”

 

I. Esto consuela a los obedientes, y debe producir temor en los desobedientes. Nada escapa su noticia, Heb. 4:13.

v  Para los fieles significa comunión con Dios. 2 Cor. 6:16, Dios está en su templo, “habitaré y andaré entre ellos”.

v  Heb. 10:22, “acerquémonos con corazón sincero”. ¿Cómo? Obedecer al evangelio y ser fieles.

v  Efes. 2:17, “Y vino y anunció las buenas nuevas: paz para vosotros que estabais lejos”. Pero ahora estamos “cerca”.

 

II. “Parece que Dios está lejos de mí”. A veces oramos a Dios, pero parece que no nos oye.

v  A veces los hijos de Dios se sienten solos. Oran, confiesan pecados, hacen lucha fuerte, pero aun así se sienten tristes y abandonados.

v  Se pregunta: “¿Qué tengo? ¿Por qué estoy tan desalentado y deprimido? ¿Dónde está mi fe en Dios?”

v  No estamos solos en esto. Job 23: 8-10, “He aquí, me adelanto, y El no está allí, retrocedo, pero no le puedo percibir;

 

III. Pero, Job 10:12, Recuerde que Dios es bondadoso. “Vida y misericordia me has concedido, y tu cuidado ha guardado mi espíritu”.

v  Job 42:2, Dios tiene todo poder. “Yo sé que tú puedes hacer todas las cosas, y que ningún propósito tuyo puede ser estorbado”.

v  Job  23:10, Dios se fija en todo detalle de nuestra vida. “Él conoce el camino en que ando; cuando Él me haya probado, saldré como oro”.

v  Job 34:13. Dios tiene control sobre todo. “¿Quién le ha puesto a cargo de su tierra? ¿Quién le ha encomendado el mundo entero?”

v  Job 23:14, Dios tiene plan para mi vida. “Él completará lo que ha determinado acerca de mí, y tiene en mente muchas cosas semejantes”.

v  Job 19:25, Sobre todo, me salvará. “Pero yo sé que mi Redentor vive, y que al final se levantará sobre el polvo”. Himno No. 225 (Cantos Espirituales).

v  Job 1:21, Si no entendemos tengamos la actitud de Job: “Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo volveré allá. El Señor dio y el Señor quitó; bendito sea el nombre del Señor”.

v  Y estar resueltos a serle fieles en todo. Uno de los dichos sobresalientes de la Biblia es el siguiente: Job 13:15, “He aquí, aunque Él me mate, en Él he de esperar”.

 

            IV. Dios sólo abandona a los que le abandonan.

v  1 Crón. 28:9, David dijo a Salomón, “reconoce al Dios de tu padre.. Si tú le buscas, El se dejará hallar; pero si le abandonas, El te rechazará para siempre”.

v  Si no abandonamos a Dios, El no abandonará a nosotros. Deut. 31:6, “¡Esforzaos y sed valientes! ... El no te abandonará ni te desamparará.”

v  Deut. 31:16, “este pueblo… me dejará y quebrantará mi pacto que hice con él. 17. los abandonaré y esconderé mi rostro de ellos”.

v  2 Crón. 15:2, “el Señor estará con vosotros mientras vosotros estéis con El. Y si le buscáis, se dejará encontrar por vosotros; pero si le abandonáis, os abandonará”. 24:20.

 

V. Pero a veces David se sentía como abandonado, aunque era hombre que Dios llamó “un hombre conforme a su corazón”,  1 Sam. 13:14.

v  A veces David pensaba que Dios estaba lejos de él, como si lo hubiera abandonado. Sal. 43:2, “Siendo tú el Dios de mi fortaleza, ¿por qué me has desechado?”

v  Sal. 44:23, “Despierta; ¿por qué duermes, oh Señor? Despierta; no nos abandones para siempre”. Afligido COMO SI fuera abandonado.

v  Sal. 88:14, “¿Por qué desechas mi alma, oh Jehová? ¿Por qué escondes de mí tu rostro?” Sufrimiento COMO SI fuera desechado por Dios.

v  Sal 22:1, “¡Dios mío, Dios mío! ¿Por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación y de las palabras de mi clamor?”

v  Dios no le  había desamparado, pero a veces así le parecía a David. Se sentía muy solo, como abandonado en su sufrimiento y miseria.

 

VI. Esto explica lo que Jesús dijo en la cruz.

v  Mat. 27:46, “Jesús clamó a gran voz… Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado”, citando el Sal. 22:1, profecía de su sufrimiento.

v  Dios no le había desamparado, como no había desamparado a David. Cristo nunca desamparó a Dios y por eso nunca fue desamparado por Dios, Jn. 16:32, el Padre estaba con El. Jn. 8:29, “no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada”. Seguramente en la cruz hizo “lo que le agrada”.

v  Salmo 22:24 (v. 1, “¿Por qué me has desamparado?”). Ahora el v. 24 del mismo capítulo: “no despreció ni desdeñó la aflicción del afligido, ni de él escondió el rostro; sino que cuando clamó a Él, le oyó”.

v  Mat. 26:53, “piensas que no puedo rogar a mi Padre, y El pondría a mi disposición ahora mismo más de doce legiones de ángeles?”

v  Lo mismo en la cruz, podía haber rogado al Padre para que enviara doce legiones de ángeles, pero ¿cómo oírle Dios si no estaba cerca, si le había dado las espaldas, escondido su rostro y le había abandonado a morir solo?

            Tengamos cuidado de limitarnos a lo que el texto dice. No agreguemos teología     sectaria que enseña que los pecados del mundo fueron imputados (contados) a   Jesús y que siendo tan pecador Dios no aguantaba verle y escondió su rostro.      Ningún texto dice tal cosa.

 

VII. El calvinismo enseña que Cristo llegó a ser pecador repugnante y, por eso,      que Dios no pudo verlo, que le dio espaldas, que lo desamparó. La Biblia no dice             tal cosa.

v  2 Cor. 5:21, “Al que no conoció pecado, le hizo pecado por nosotros”; es decir, el sacrificio por el pecado. Oseas 4:8, “del pecado de mi pueblo comen” (“las ofrendas por el pecado”).

v  Si Cristo hubiera sido “pecador” no podría haber sido sacrificio por los pecados, 1 Ped. 1:18, 19.

v  1 Ped. 2:24, “llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero”, pero no llegó a ser pecador; es como Mat. 8:17, “cargó con nuestras enfermedades”, las sanó, pero eso no le hizo enfermo.

v  Juan 16:32, “la hora viene, y ha llegado ya, en que seréis esparcidos cada uno por su lado y me dejaréis solo. Pero no estoy solo, porque el Padre está conmigo”. Jn. 8:29 “hago lo que le agrada”.

v  Entonces, ¿no debemos citar este texto? Claro que sí, pero al citarlo no afirmar lo que la Biblia no afirma, tales expresiones como el himno que dice, “Dios te dejó”; “de ti Dios apartó”; “la escondida faz”, etc. (Himno 15, Cánticos Espirituales).

v  Dios no abandonó a Cristo en la cruz porque Cristo no había abandonado a Dios. La Biblia no dice que “Dios le dio espaldas a Jesús en la cruz”.

 

VIII. Tampoco está lejos de su pueblo. 1 Sam. 12:22, “Dios no desampara a su pueblo”. Sal. 37:28, “Porque el Señor no abandona a sus santos.”

v  No lo podemos ver con los ojos físicos, pero sí con los ojos de fe. El no promete que vamos a “sentir” su presencia. No andamos por vista ni por el sentir sino por fe. 2 Cor. 5:7. No da “señales”.

v  El promete, Sant. 4:8, “Acercaos a Dios, y El se acercará a vosotros”. ¿Cómo nos acercamos a Dios? 1:22, ser “hacedores de la palabra”.

 

IX. ¿Cómo nos acercamos a Dios?

v  Nos acercamos a Dios en oración, Heb. 4:15, 16, “acerquémonos con confianza”. Lam. 3:57, “Te acercaste el día que te invoqué,

v  Dios está cercano en su palabra y mandamientos. Sal. 119:151, “Cercano estás tú, oh Jehová; todos tus mandamientos son verdad”.

v  Job 23:12, “Del mandamiento de sus labios no me he apartado, he atesorado las palabras de su boca más que mi comida”.

v  Dios está cercano en sus promesas. Heb. 7:19, “una esperanza mejor, por la cual nos acercamos a Dios”.

v  Está con nosotros en cada reunión de la iglesia. Mat. 18:20, “Porque donde dos o tres están congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. ¿Quiere acercarse a Dios? No deje de asistir a los servicios de la iglesia.

 

v  Invitación: Isa. 55:6, “Buscad al SEÑOR mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cerca”.