LOS CARISMÁTICOS FASCINADOS CON LO QUE NO EXISTE
I. LOS DONES DEL ESPÍRITU SANTO SE ACABARON, DEJARON DE EXISTIR.
A. El énfasis en los servicios de los pentecostales y otros
carismáticos es sobre los dones del Espíritu
Santo (profecías, lenguas, sanidades,
etc.) que ya se acabaron y cesaron. No aceptan que
el Nuevo Testamento sea “lo perfecto”, la
perfecta revelación de Cristo, el
completo Nuevo Testamento, sino que prefieren dedicarse a
lo que se acabó y cesó, lo que no existe.
B. 1 Corintios 13:8 lo afirma clara y enfáticamente. “El
amor nunca deja de ser; pero las profecías se
acabarán, y cesarán las lenguas, y la
ciencia acabará”. “Profecías… lenguas… y la ciencia”
eran dones del Espíritu Santo. Estos tres dones
representan todos los nueve dones de 1
Corintios 12:7-10.
B. 1
Corintios 13:9, 10 explica cuándo iban a cesar: “Porque
en parte conocemos, y en parte profetizamos; 10
mas cuando venga lo perfecto, entonces lo
que es en parte se acabará”. El lenguaje no
podría ser más claro. Obviamente al principio de
la iglesia los dones eran el medio de
revelar la palabra de Dios, pero Pablo afirma que por
medio de ellos “en parte conocemos y en parte
profetizamos”. Entonces presenta el
contraste. Lo opuesto de “en parte” es “lo perfecto”
(“completo” es otra traducción correcta de
telios) y puesto que “en parte” tiene que
ver con la revelación de la palabra de Dios, también
“lo perfecto” tiene que ver con la revelación de
la palabra de Dios y significa el
completado perfecto Nuevo Testamento.
C.
Algunos enseñan que “lo perfecto” se refiere a Cristo (y el
“nuevo orden” que supuestamente será establecido
cuando Cristo vuelva), pero esta es
interpretación totalmente equivocada. Es
necesario explicar “lo perfecto” en su contexto donde obviamente se
pone en contraste con “en parte”. Si podemos
identificar el significado de “en parte”,
de seguro podemos identificar el
significado de “lo perfecto”. Al decir “en parte” Pablo habla de
conocer por medio de los dones del Espíritu
Santo una parte de la revelación de Dios
(“en parte conocemos, y en parte profetizamos”) y
“lo perfecto” está en la misma categoría o
esfera con “en parte”. Por lo tanto,
tiene que significar la perfecta revelación, o sea, el
completo Nuevo Testamento.
D. Si
“lo perfecto” hubiera sido Cristo (una persona),
entonces ¿qué persona habría sido “en parte”?
Desde luego, Cristo es perfecto, pero no
se llama “lo perfecto” ni mucho menos en este
contexto. Por lo tanto, no tiene sentido decir
que Cristo es “lo perfecto”. Recordemos 2
Timoteo 2:15 que nos exhorta a usar bien la
palabra.
E.
Por varios años la iglesia no tenía la completa revelación
de la voluntad de Dios. El Espíritu Santo estaba
con los apóstoles recordándoles lo que
Jesús enseñaba (Juan 14:26) y guiándoles a toda
la verdad (Juan 16:13) pero no lo hizo en un
solo día. Conocían y predicaban “en
parte”. Por ejemplo, hasta Hechos 10 no sabían que Dios
aceptaría a los gentiles y hasta Hechos 15 que
no deberían imponer la circuncisión sobre
los hermanos gentiles. En realidad a través del
primer siglo el Espíritu Santo estaba revelando
la voluntad de Dios a los apóstoles y a
través de ellos a la iglesia.
II. LOS
DONES DEL ESPÍRITU SANTO ERAN PARA CONFIRMAR LA PALABRA QUE EL
ESPÍRITU SANTO REVELÓ A LOS APÓSTOLES.
A.
Marcos 16:17-20, “Y estas señales seguirán a los que creen:
En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán
nuevas lenguas (Hechos 2:4-11); 18
tomarán en las manos serpientes (Hechos 28:3-5), y si
bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre
los enfermos pondrán sus manos, y sanarán
(Hechos 2:43; 3:1-10; 28:8-9). 19 Y el Señor,
después que les habló, fue recibido arriba en el
cielo, y se sentó a la diestra de Dios.
20 Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes,
ayudándoles el Señor y confirmando la palabra
con las señales que la seguían. Amén.”
B.
Hechos 14:3, “Por tanto, se detuvieron allí mucho tiempo,
hablando con denuedo, confiados en el Señor, el
cual daba testimonio a la palabra de su
gracia, concediendo que se hiciesen por las manos de
ellos señales y prodigios”.
C. Hebreos 2:3, 4, “¿cómo escaparemos nosotros, si
descuidamos una salvación tan grande? La cual,
habiendo sido anunciada primeramente por
el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, 4
testificando Dios juntamente con ellos, con
señales y prodigios y diversos milagros y
repartimientos del Espíritu Santo según su
voluntad”. Por eso, tenemos el completo Nuevo
Testamento que fue confirmado por los
milagros y repartimientos del Espíritu Santo.
D.
Pero los carismáticos no están contentos con el Nuevo
Testamento, ni con las señales hechas por los
apóstoles que lo confirmaron. Aunque los
dones ya no existen ellos tienen “otro
espíritu” (2 Corintios 11:4) cuyos dones son completamente falsos,
profecías falsas, “lenguas” falsas (“lenguas”
que no son ninguna clase de lengua).
Supuestamente hablan a Dios en una “lengua extática” o
“lengua angélica”, pero en realidad son
meramente sonidos “ininteligibles
expresados en secuencias rítmicas y repetitivas,
propio del habla infantil” (Wikipedia), todo
estimulado por los gritos de la gente y
la música instrumental a todo volumen. Obviamente tal
“adoración” no es más que una expresión
emocional sin nada de dominio propio.
E.
Sus llamadas sanidades no son nada milagrosas. No sanan a
los verdaderos ciegos (Juan 9:1), ni a los
verdaderos cojos (Hechos 3:2), ni mucho
menos levantan a los muertos (Hechos 9:40). Sanan
solamente enfermedades causadas por los nervios
o las emociones (enfermedades
psicosomáticas).
III. LOS
DEL PRIMER SIGLO QUE TENÍAN LOS VERDADEROS DONES DEL ESPÍRITU
SANTO NO TENÍAN VENTAJA SOBRE NOSOTROS.
A.
Muchos creen que los del primer siglo que tenían los dones del Espíritu Santo
tenían gran ventaja sobre nosotros y les tienen envidia. Los tales parecen
pensar que los dones eran la perfecta panacea o remedio para cualquier mal, pero
tal concepto está muy equivocado. Imagínese el asistir a los servicios el
domingo sin tener un ejemplar del Nuevo Testamento. Esta es una verdadera
bendición y una verdadera ventaja. ¡Cómo debemos dar gracias a Dios por ella!
B.
Los corintios tenían los dones pero a la vez un montón de problemas (división,
carnalidad, litigación, fornicación, etc.). Recibieron cartas de Pablo pero
urgentemente necesitaban todo el Nuevo Testamento. Nosotros con el Nuevo
Testamento (toda la Biblia completa) tenemos toda la ventaja. Somos sumamente
bendecidos. Nadie debe tener envidia de los hermanos del primer siglo que tenían
los dones milagrosos.
C.
Pablo explica que los dones pertenecían a la época de la infancia de la iglesia.
1 Corintios 13:11, “Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño,
juzgaba como niño, mas cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño”. Al dejar
de ser niños y llegar a ser hombres nunca volvemos al estado de niño, pero esto
es precisamente lo que los carismáticos quieren hacer y la niñería que practican
está saturada de cosas falsas (lenguas falsas, profecías falsas, milagros falsos,
etc.).
D.
Recuérdese siempre que nosotros tenemos “toda la verdad” (Juan 14:26; 16:13).
Tenemos todo el consejo de Dios. Estamos equipados por las Escrituras para
aprender, aplicar y enseñar la voluntad de Dios y para reprender y corregir el
pecado y el error.
IV. LOS
CARISMÁTICOS PREFIEREN EL ANDAMIO.
A. El
andamio es el armazón provisional de madera o metal que sostiene a los
trabajadores y materiales mientras construyen (o reparan o pintan) una casa u
otro edificio.
B.
Los dones milagrosos eran una clase de andamio que era necesario para establecer
la obra del Señor.
C.
Nunca he sabido de gente que haya dejado el andamio como construcción permanente
alrededor de su casa. El andamio es necesario pero no es permanente. Habiendo
terminado la construcción del edificio se quita el andamio. ¿Quién desea vivir
en una casa sin quitar el andamio? ¿Qué pensaría de un hombre que habiendo
dejado el andamio diera la bienvenida a los visitantes diciendo, “Pasen, mi
andamio es su andamio y mi casa es su casa”?
D. Es
lo que hacen los carismáticos. Están fascinados de su andamio que ni siquiera es
el andamio bíblico sino una construcción humana y falsa de principio a fin. Sin
embargo, su falso andamio es toda su gloria. Es el corazón de su servicio (culto).
Pasan horas practicando lo que llaman profecías, lenguas y sanidades y no hacen
caso al verdadero evangelio y la verdadera iglesia de Cristo.
E. No
les interesa a los carismáticos ser verdaderos adoradores de Dios. Juan 4:24,
“Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que
adoren”. Esa adoración “en espíritu y en verdad” se enseña claramente en el
Nuevo Testamento: (1) reunirse el primer día de la semana para orar (Efesios
6:18; 1 Tesalonicenses 5:17); (2) para cantar himnos espirituales sin
instrumentos de música (Efesios 5:19; Colosenses 3:16, el “instrumento”
designado por Dios es el corazón, “cantando y alabando al Señor en vuestros
corazones”); (3) para predicar la palabra (Hechos 20:7); (4) para participar de
la cena del Señor (Mateo 26:28; Hechos 20:7; 1 Corintios 11:23-25); (5) para
hacer la ofrenda “según haya prosperado” y “como propuso en su corazón” para
hermanos necesitados y para ayudar a los evangelistas (1 Corintios 16:1, 2; 2
Corintios 9:7; Filipenses 4:15, 16).
V. LOS
CARISMÁTICOS SON COMO LOS HERMANOS JUDÍOS QUE NO QUERÍAN DEJAR
LA LEY DE MOISÉS.
A. La Ley de Moisés era muy necesaria, no solamente para la religión del pueblo
de Israel por unos 1,500 años, sino también para el desarrollo del plan de Dios
para salvar al mundo, pero esa ley nunca fue dada a otras naciones y es un gran
error imponer esa ley o cualquier parte de esa ley sobre la iglesia de Cristo.
B. Había varias cosas y actividades enseñadas por la Ley de Moisés que servían
de ejemplos, tipos y sombras que fueron cumplidos por Cristo (Hebreos 10:1;
Lucas 24:44). La Pascua de Éxodo 13 era tipo de Cristo, “nuestra pascua” (1
Corintios 5:7). Los tipos y sombras de la ley de Moisés eran importantes y muy
necesarios al plan de Dios pero eran provisionales. Nunca fueron diseñados para
ser permanentes. Habiendo cumplido su propósito fueron quitados. Colosenses 2:14
dice que el “acta de los decretos” fue quitada “de en medio… clavándola en la
cruz”.
C. Pero hubo problema grande con los hermanos judaizantes del primer siglo que
querían imponer ciertas partes de la Ley de Moisés sobre la iglesia. Todavía hoy
en día hay muchos que profesan ser de la religión de Cristo que hacen lo mismo:
(1) enseñan la necesidad de guardar el sábado (Éxodo 20:8-10) que el pueblo de
Israel había de hacer como memorial de haber sido sacado de Egipto (Deuteronomio
5:3, 15); (2) imponen el diezmo que era requerido del pueblo de Israel para
sostener a los levitas, (Números 18:20, 21); (3) usan instrumentos de música en
el culto que era práctica requerida por la ley de Moisés cuando ofrecían el
holocausto, (2 Crónicas 29:25-28; Salmo 150).
D. La carta a los Hebreos explica ampliamente que la religión enseñada por la
ley de Moisés era inferior a la religión de Cristo. Hebreos 7:19, “nada
perfeccionó la ley”, pero muchos prefieren lo imperfecto. Hebreos 8:6, Cristo “es
mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas”, pero los que
promueven la guarda del sábado, el quemar incienso, el imponer el diezmo y el
uso de instrumentos de música en el culto prefieren el primer pacto, el pacto
inferior e imperfecto.
E. Los tales no aceptan la enseñanza de la carta a los Hebreos porque en este
libro se enseña con todo énfasis que el sistema religioso bajo la ley de Moisés
era imperfecto. Era divino y por eso necesario, pero era solamente para el
pueblo de Israel y era provisional y temporáneo.
F. Los judaizantes y carismáticos tienen mucho en común. Ambos prefieren lo
provisional, lo temporáneo, lo imperfecto. Y lo que hace su situación aun más
triste y lamentable es que practican una ley que ya no existe para nadie, y
piensan que tienen dones del Espíritu Santo cuando en realidad estos ya no
existen y los pobres dones falsos que ellos tienen son imitaciones absurdas de
los dones verdaderos que sí existieron en el tiempo de los apóstoles pero al
morir ellos y los que recibieron dones del Espíritu Santo por medio de la
imposición de las manos de los apóstoles los dones verdaderos del Espíritu Santo
dejaron de existir.
CONCLUSIÓN.
A. Los carismáticos son como el niño que está fascinado con el bonito papel en
el que viene envuelto el regalo costoso. Son como los niños que creen en Papá
Noel (“Santa Claus”). Los “dones” de los carismáticos existen solamente en su
imaginación como “Papá Noel” solamente existe en la imaginación de los niños.
B. Son bien tercos rehusando y rechazando lo que Pablo explica con toda claridad
en 1 Corintios 13:8-10 con respecto a la cesación de los dones del Espíritu
Santo.
C. Y como colmo de males los carismáticos han inventado un sistema falsificado
de llamados “dones” sabiendo que la mayoría de la gente no quiere el evangelio
verdadero y tienen que ser ganados por cosas místicas, misteriosas y
sensacionales.
D. A fin de cuentas sus “dones” y su “música” y todo el desorden de sus
servicios son entretenimiento. Verdaderamente son atraídos a sus campañas miles
de personas como otros son atraídos a los juegos de deportes.
E. ¡Qué horrible desprecio del Señor Jesús quien sufrió tanto en la cruz para
comprar su verdadera iglesia! (Hechos 20:28).