EL PROPÓSITO ETERNO
DE DIOS
“A LOS QUE ANTEMANO
CONOCIÓ - PREDESTINÓ – LLAMÓ – JUSTIFICÓ – GLORIFICÓ”
ROMANOS 8:24-32
Una sugerencia práctica con respecto a la
interpretación de textos difíciles: ES INDISPENSABLE QUE INTERPRETEMOS TALES
TEXTOS A LA LUZ DE TEXTOS CLAROS.
El apóstol Pedro dice que entre las cosas que nuestro amado
hermano Pablo escribe “hay algunas difíciles de entender, las cuales los
indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su
propia perdición” 2 Pedro 3:16. Este texto en Romanos es un ejemplo clásico de
tal perversión. Calvinistas ven la palabra “predestinó” y bajo la dirección de
Satanás formulan una teología que niega el amor y la imparcialidad de Dios y le
acusa de ser un monstruo que condena a millones al infierno antes de que nacer.
Por no aceptar y seguir esta sencilla regla muchos tuercen
Apocalipsis 20:4, enseñando un reino terrenal de Cristo de mil años; los
mormones tuercen 1 Corintios 15:29 enseñando el bautismo vicario (que uno puede
ser bautizado por su abuelo que no fue bautizado); los falsos testigos de La
Atalaya tuercen Colosenses 1:15, 16 y blasfeman contra Cristo enseñando que Él
fue creado; los católicos tuercen Mateo 16:18 enseñando que Pedro era el primer
Papa; y millones tuercen los textos que hablan de fe, diciendo que somos salvos
por la fe sola, evitando que sus seguidores obedezcan al evangelio (Hechos 2:38;
2 Tesalonicenses 1:7,8; 1 Pedro 4:17). Todos estos y muchos otros simple y
sencillamente ignoran el contexto, textos paralelos y textos bien claros sobre
los temas de los textos que tuercen.
PABLO NO ENSEÑA LA PREDESTINACIÓN CALVINISTA. No enseña
nada que contradiga la responsabilidad del hombre, ni el libre albedrio. La
salvación se ofrece a todos (Mateo 11:28; 28:19; Apocalipsis 22:17). Dios no
hace acepción de personas (Hechos 10:34, 35; Romanos 2:11). En esta misma carta
encontramos el plan de salvación: oír (10:17); creer (1:16); arrepentirse (2:5);
confesión de Cristo (10:9, 10); bautismo (6:4).
ESTE TEXTO DESCRIBE EL PROPÓSITO ETERNO DE DIOS DE TENER UN
PUEBLO ESCOGIDO QUE VIVIRÁ CON ÉL ETERNAMENTE. Leemos en el Antiguo Testamento
del pueblo escogido, el pueblo de Israel, pero el propósito de tener ese pueblo
era provisional y preparatorio. Uno de los problemas principales en la iglesia
del primer siglo era el concepto erróneo de muchos judíos de que ellos serían el
pueblo escogido de Dios para siempre y que los gentiles que quisieran ser hijos
de Dios para ser salvos y heredar la vida eterna tenían que aceptar la
circuncisión para llegar a ser judíos.
EL PUEBLO ESCOGIDO DE DIOS ES LA IGLESIA DE CRISTO.
Compárense Efesios 1:9-11; 3:11; 2 Timoteo 1:9, 10. La iglesia de Cristo es el
reino de Dios, el cuerpo de Cristo, el templo del Espíritu Santo, el rebaño de
Cristo. El pueblo de Israel era el pueblo escogido de Dios bajo el Antiguo
Testamento pero ese pueblo no se describe con estos términos.
Más bien, la iglesia de Cristo, compuesta de personas de
todas las naciones que obedecen al evangelio, es el pueblo escogido, el pueblo
especial de Dios, el pueblo que estará con Dios eternamente en el cielo. Romanos
16:16, las iglesias (congregaciones) mencionadas en la Biblia no son iglesias
católicas, bautistas, metodistas, pentecostales, etc. sino “iglesias de Cristo”.
Lástima que tantos millones desprecien la iglesia de Cristo para tener sus
propias iglesias.
De la iglesia de Cristo Pablo habla en este texto en
Romanos 8. Se identifica como los que aman a Dios porque los que aman a Dios
obedecen al evangelio (Hechos 2:38) y son añadidos a la iglesia de Cristo
(Hechos 2:47). Y todo lo que Pablo dice en los versículos 29 y 30 tiene que ver
con la iglesia de Cristo.
Romanos 8 promete ricas bendiciones para los
hijos de Dios, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu.
(8:4-8).
Pablo
explica que el Espíritu Santo mora en los hijos de Dios. 8:9,11; Hechos 2:38
(“el don del Espíritu); 5:32. Tenemos las “primicias del Espíritu”; es decir, el
perdón de pecados, la justificación, la redención, la reconciliación con Dios, y
una conciencia limpia.
Rom.
8:16, Al explicar el plan de salvación a nosotros y confirmando que somos hijos
de Dios cuando obedecemos al evangelio, el Espíritu da testimonio a nuestro
espíritu de que somos hijos de Dios.
EN ESPERANZA
FUIMOS SALVOS
La
esperanza de la vida eterna. 8:24, 25, “Porque en esperanza fuimos salvos; pero
la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué
esperarlo? 25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo
aguardamos”.
La
esperanza consiste del deseo de obtener la salvación (la vida eterna) y el creer
que lo que deseamos ha de suceder (Diccionario de la Lengua Española).
Obviamente la esperanza es parte integral de la salvación.
EL ESPÍRITU INTERCEDE POR
NOSOTROS
8:26,
27, “Y de igual manera el Espíritu
nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo
sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del
Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos”.
No
debe haber ninguna confusión entre la intercesión del Espíritu y la de Cristo,
nuestro único Mediador. 1 Timoteo 2:5, “Porque hoy un solo Dios, y un solo
mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre”. Cristo es nuestro
perfecto Mediador, siendo Dios y hombre.
TODAS LAS COSAS (DE ESTE CONTEXTO) AYUDAN A BIEN A LOS QUE AMAN A DIOS
8:28, “Y SABEMOS QUE A LOS QUE AMAN A DIOS…” Este texto habla acerca de
las bendiciones de los que aman a Dios. Por eso, conviene enfatizar los muchos
textos que enseñan que si amamos a Cristo guardamos sus mandamientos. Los que no
obedecen al evangelio simple y sencillamente no aman a Dios.
Juan 14:15,
Si me amáis, guardad mis mandamientos. Juan 14:23, El que
me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos
morada con él. 1 Juan 3.18, Hijitos
míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad. 2 Cor. 8:8
8 No hablo como quien manda,
sino para poner a prueba, por medio de la diligencia de otros, también la
sinceridad del amor vuestro. Gál. 5:6 porque
en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe
que obra por el amor. 2 Juan 6Y este es el amor, que andemos según sus
mandamientos. Este es el mandamiento: que andéis en amor, como vosotros habéis
oído desde el principio.
“TODAS LAS COSAS LES AYUDAN A BIEN” (“DIOS HACE QUE
TODAS LAS COSAS COOPEREN PARA BIEN”). ¡Dios lo hace! Pable se refiere a todas
estas cosas del contexto que él está mencionando por medio de las cuales Dios
obra para el beneficio de los que en verdad le aman. La esperanza nos ayuda a
bien. La intercesión del Espíritu Santo nos ayuda a bien. Y lo que sigue en los
versículos 29 y 30 nos ayuda a bien porque es conectado con el ver. 28 con la
palabra “porque”. No está diciendo que cualquier evento o cualquier
circunstancia o cualquier otra cosa le ayuden a bien. No está diciendo que si el
tren mata su vaca esto le ayuda a bien.
Es cierto que en 5:3-5 Pablo enseña que las tribulaciones
pueden tener beneficios espirituales, pero eso no es la enseñanza de 8:28, sino
que todas las bendiciones enumeradas en esta carta e incluso todo el plan de
Dios son la obra de Dios para el beneficio de los que aman y obedecen a Dios.
“…
ESTO ES, A LOS QUE CONFORME A SU PROPÓSITO SON LLAMADOS”.
La palabra “propósito” es palabra clave en este texto.
Pablo describe a grandes rasgos el propósito eterno de Dios, el plan de
salvación, y cómo los que aman a Dios (los que obedecen al evangelio) son
bendecidos ahora y cómo serán bendecidos en el futuro.
Los llamados son una clase de gente llamada por el
evangelio (Romanos 1:6, 7; 1 Cor. 1:2, 24; Judas 1. No son llamados por medio de
sueños, visiones, etc. sino por el evangelio. 2 Tesalonicenses 2:14,
a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para
alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo”. Cuando el puro evangelio del NT
es predicado, Dios está llamando.
Juan 6:44, 45, “Ninguno puede venir a mí, si el Padre que
me envió no le trae; y yo le resucitaré en el día postrero. Escrito está en los
profetas: Y serán todos enseñados por Dios. Así que, todo aquel que oyó al
Padre, y aprendió de él, viene a mí”. Dios llama y Dios trae al hombre pero
¿cómo? Por medio de enseñarle el evangelio. De esta manera el hombre oye a Dios
y viene a Cristo.
Por lo tanto, los “llamados” son los que son invitados por
el evangelio y lo obedecen. Los llamados no son meramente los invitados sino los
obedientes.
8:29, “PORQUE
A LOS QUE ANTES (DE ANTEMANO) CONOCIÓ (APROBÓ)…” Compárese Mateo 7:23, “Y
entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad”.
“Conocer” significa “aprobar”.
Los que de antemano Dios conoció eran los que con fe y amor
aceptarían la invitación de Dios de obedecer su voluntad (el evangelio) y, de
esa manera demostrar que son los que aman a Dios y,
por eso, serían aceptados por Él. Estos
son aquellos que serían salvos por haber respondido a las condiciones de perdón
y justificación.
Estos no son personas que se pudieran especificar por
nombre, sino más bien, son personas que serían obedientes al evangelio según el
propósito de Dios.
“TAMBIÉN LOS PREDESTINÓ PARA QUE FUESEN HECHOS CONFORMES A
LA IMAGEN DE SU HIJO …” Efesios 1:3-6, nos escogió en Cristo para que fuéramos
santos y sin mancha … nos predestinó para adopción como hijos.
Los que obedecen al evangelio y, por eso, son aprobados por
Dios, son predestinados a ser hechos conformes a la imagen de su Hijo.
Esta predestinación es de todos los que obedezcan al
evangelio y perseveren en la fe conformándose a la imagen de Cristo. 1 Cor.
15:49; Filipenses 3:21; Col. 3:4; 1 Jn. 3:2, 3. 17, 18.
La “predestinación” descrita aquí por Pablo no es ni el
primo quincuagésimo de la llamada predestinación de la blasfemia calvinista que
predestina a millones al infierno antes de nacer.
“PARA QUE ÉL SEA EL PRIMOGÉNITO ENTRE MUCHOS HERMANOS”. La
palabra “primogénito” significa señorío. Col. 1:15, “Él es la imagen del Dios
invisible, el primogénito de toda creación”. Esto no significa como dicen los
falsos testigos de La Atalaya que Cristo era creado primero, sino que Él es
Señor de toda la creación, para que en todo tenga la preeminencia (v. 18). Juan
1:3, “Todas las cosas por Él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido
hecho, fue hecho”. Apoc. 3:14, “El Principio (Autor) de la creación de Dios”.
Romanos 8:30, “Y A LOS QUE PREDESTINÓ, A ÉSTOS
TAMBIÉN LLAMÓ; Y A LOS QUE LLAMÓ, A ÉSTOS TAMBIÉN JUSTIFICÓ; Y A LOS QUE
JUSTIFICÓ, A ÉSTOS TAMBIÉN GLORIFICÓ”.
“JUSTIFICÓ”. Hechos 2:38, “perdón de los pecado”.
“Justificado” significa no culpable de pecado.
“GLORIFICÓ”. La resurrección del cuerpo y la vida eterna.
Dios es eterno. No es limitado por lo que llamamos “tiempo”. Por eso, puede
hablar de lo que sucederá como algo que ya pasó. El propósito de Dios es
realidad.
Romanos 8:31 “¿QUÉ, PUES, DIREMOS A ESTO? SI
DIOS ES POR NOSOTROS, ¿QUIÉN CONTRA NOSOTROS? 32 EL QUE NO ESCATIMÓ
NI A SU PROPIO HIJO, SINO QUE LO ENTREGÓ POR TODOS NOSOTROS, ¿CÓMO NO NOS DARÁ
TAMBIÉN CON ÉL TODAS LAS COSAS?”