EL CRECIMIENTO DEL REINO

 

Introducción:

     A. Las fronteras de los reinos terre­nales se extienden en varias formas: por ejemplo, por medio de uniones políticas, por medio del casamiento entre príncipes y princesas de diversas naciones,  por medio de la conquista militar, por medio de compras de territorio, etc.

     B. Pero esta clase de crecimiento no requiere que haya cambio de mente en los ciudadanos, sino solamente se cambia la nación o el reino en forma externa.

     C. El crecimiento del reino de Dios requiere el cambio de mente (cambio de corazón) de los que entren en él.

 

I. El Crecimiento Del Reino Se Realiza A Través De Enseñar La Palabra.

     A. El único método de hacer crecer al reino es a través de persuadir.

          1. Hech. 19:8. La iglesia se establece en Éfeso. Pablo entró en la sinagoga, y por tres meses continuó hablando abiertamente, discutiendo y persuadiéndoles acerca del reino de Dios.

          2. Hech. 28:23 Pablo predica en Roma. “Y habiéndole fijado un día, vinieron en gran número adonde él se alojaba. Desde la mañana hasta la tarde les explicaba testificando fielmente sobre el reino de Dios, procurando persuadirlos acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas.”

          3. 2 Cor. 5:11 "Por tanto, conociendo el temor del Señor, persuadimos a los hombres, pero a Dios somos manifiestos, y espero que también seamos manifiestos en las conciencias de ustedes."

     B. Jn. 6:45 "Escrito está en los profetas: “Y todos serán enseñados por Dios”. Todo el que ha oído y aprendido del Padre, viene a Mí".

     C. Luc. 1:17, Juan "irá delante del Señor en el espíritu y poder de Elías para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y a los desobedientes a la actitud de los justos, para hacer volver los corazones, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto".

     D. Cristo dedicó su tiempo a enseñar en las sinagogas, sobre el monte, en la playa, en la plaza, en el templo,  siempre enseñando, día tras día.

     E. Cristo envió a los doce a predicar, Mat. 10:7, “Y cuando vayan, prediquen diciendo: El reino de los cielos se ha acercado”. Mateo 28:19, “Vayan, pues, y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”.

     F. Cristo envió a los setenta a decir, "Se ha acercado a vosotros el reino de Dios", Luc. 10:9.

 

II. Cristo Empleó El Proceso De Enseñar Y Rechazó A Cualquier Otro.

     A. Las tentaciones de Satanás, Mateo 4:1-11.

          1. La tentación de ser rey de pan. Mateo 4:3 “Y acercándose el tentador, le dijo: «Si eres Hijo de Dios, ordena que estas piedras se conviertan en pan

          2. La tentación de ser rey sensacional. Mateo 4:5, 6, “Entonces el diablo lo llevó a la ciudad santa, y lo puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: «Si eres Hijo de Dios, lánzate abajo, pues escrito está: “A Sus Ángeles te encomendará Y EN TUS MANOS TE SOSTENDRÁN”.

          3. La tentación de ser rey de una vez, sin sufrir.

          4. Los métodos propuestos por Sa­tanás hubieran eliminado el proceso de enseñar y persuadir para ganar súbditos para su reino.

     B. La impaciencia de Juan, Mat. 11:2,3. “Al oír Juan en la cárcel de las obras de Cristo, mandó por medio de sus discípulos a decir a Jesús: «¿Eres Tú el que ha de venir, o esperaremos a otro?»

¿Por qué esta pregunta? Tres posibles explicaciones:

          1. Dudaba. Posiblemente, pero re­cuérdese Jn. 1:32-34, “Juan también dio testimonio, diciendo: «He visto al Espíritu que descendía del cielo como paloma, y se posó sobre Él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar en agua me dijo: “Aquel sobre quien veas al Espíritu descender y posarse sobre Él, Este es el que bautiza en el Espíritu Santo”.  Y yo lo he visto y he dado testimonio de que Este es el Hijo de Dios».

          2. Quería que Jesús afirmara su Dei­dad para el beneficio de los discípulos de Juan (y tal vez quería que Él les explicara por qué no había liberado a Juan). Pero Jesús dijo, "haced saber a Juan".

         3. La explicación más lógica es que Juan se sentía frustrado por los métodos de Jesús.

             a. Las multitudes vinieron a Juan, y él les dijo que "el reino de los cielos se ha acer­cado". Les apuntaba a Jesús, "He aquí el Cordero de Dios", Jn. 1:29. Habló de juicios duros ("Su aventador está en su mano, y limpiará su era", Mat. 3:12).

            b. Pero Jesús simplemente seguía en­señando, enseñando, día tras día; el reino no vino, tampoco los juicios anunciados por Juan.

            c. Es decir, es muy posible que Juan hubiera pensado que Jesús no se aprovechó del movimiento iniciado por Juan.

            d. Ahora quería que, por lo menos, Cristo afirmara abiertamente que El era el Cristo.

     C. Pero no fue posible apresurar a Cristo.

          1. El respondió, "haced saber a Juan las cosas que oís y veis".

          2. El cumplía las profecías. Sus obras hablaron por El.

          3. Muchos textos bíblicos nos enseñan a esperar al Señor: Isa. 40:31 “Pero los que esperan en el Señor Renovarán sus fuerzas. Se remontarán con alas como las águilas,
Correrán y no se cansarán, Caminarán y no se fatigarán
; Habacuc 2:3 “Porque es aún visión para el tiempo señalado; Se apresura hacia el fin y no defraudará. Aunque tarde, espérala; Porque ciertamente vendrá, no tardará”

     D. Mat. 11:12 "Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arre­batan".

          1. Jn. 6:15 "Jesús, dándose cuenta de que iban a venir y por la fuerza hacerle rey, se retiró Él solo otra vez al monte".

          2. La gente tenía mucha prisa. Quería un reino terrenal, para librarse del yugo de Roma.

 

III. No Debemos Sacudir El Árbol Cuando La Fruta Todavía Es Verde.

     A. Cristo sabía que el proceso de en­señar requiere tiempo. El invitaba, pero no apresuraba a nadie a convertirse en discípulo.

      B. Él explicó lo difícil de ser discípulo. Mat. 10:34-37,  »No piensen que vine a traer paz a la tierra; no vine a traer paz, sino espada.  Porque vine a poner al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra;  los enemigos del hombre serán los de su misma casa. »El que ama al padre o a la madre más que a Mí, no es digno de Mí; y el que ama al hijo o a la hija más que a Mí, no es digno de Mí.” Mateo 16:24, Entonces Jesús dijo a Sus discípulos: «Si alguien quiere venir en pos de Mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y que me siga.

     C. El habló de calcular gastos, Luc. 14:25-33, “Grandes multitudes acompañaban a Jesús; y Él, volviéndose, les dijo: «Si alguien viene a Mí, y no aborrece a su padre y madre, a su mujer e hijos, a sus hermanos y hermanas, y aun hasta su propia vida, no puede ser Mi discípulo. El que no carga su cruz y me sigue, no puede ser Mi discípulo. »Porque, ¿quién de ustedes, deseando edificar una torre, no se sienta primero y calcula el costo, para ver si tiene lo suficiente para terminarla? No sea que cuando haya echado los cimientos y no pueda terminar, todos los que lo vean comiencen a burlarse de él, diciendo: “Este hombre comenzó a edificar y no pudo terminar”.  »¿O qué rey, cuando sale al encuentro de otro rey para la batalla, no se sienta primero y delibera si con 10,000 hombres es bastante fuerte para enfrentarse al que viene contra él con 20,000?  Y si no, cuando el otro todavía está lejos, le envía una delegación y pide condiciones de paz.  Así pues, cualquiera de ustedes que no renuncie a todas sus posesiones, no puede ser Mi discípulo.”

     D. Nunca sacudió al árbol para hacer caer fruta verde.

     E. No hay nada que substituya a la en­señanza de la Palabra, como algunos suponen. He aquí algunas cosas que la gente emplea en lugar de enseñar el evangelio sencillo para persuadir y cam­biar corazones:

          1. "Vengan con nosotros, tenemos un buen grupo, muy amistoso".

          2. "Vengan, es grande la iglesia, será bueno para su negocio".

          3. "Vengan, tenemos una escuelita, un kindergarten".

          4. "Vengan, hay recreo para todos, ac­tividades sociales".

          5. "Vengan, nuestro predicador es un gran orador, muy elocuente".

          6. "Vengan, tenemos un edificio có­modo, conveniente para usted".

          7. En algunas clases de adies­tramiento para la obra personal, se en­señan tácticas como las que usan los vendedores: por ejemplo, hacer preguntas que serán contestadas afirmativamente, hasta que se compre la mercancía.

     F. ¿Por qué no emplear pistola mejor? En cuanto al crecimiento ver­dadero del reino, el resultado es igual. ¿Por qué no hacer como los españoles hicieron con los indios (meter la espada en sus costillas y preguntarles "¿Quieren ser Católicos?)"

     G. Los comunistas "convierten" a millones, pero ¿en qué sentido?

     H. Es como el niño cuando la mamá le dijo por tercera vez, "Siéntate", él contestó, "Me siento, pues, pero adentro todavía estaré parado". (Parece que muchos de los miembros que están "sentados" en la iglesia todavía están "parados" en el mundo).

 

IV. Algunos Creen Que Seguramente Nuestros Métodos No Sirven.

A. Hay poco crecimiento, pocos bautismos, poca asistencia. ¿No será porque debemos cambiar de métodos?

     B. Puede haber cosas que deben corregirse. A veces no crecemos porque no trabajamos, o porque hay miembros in­fieles que deben corregirse.

     C. Pero no debemos olvidar la parábola del sembrador (Luc. 8:4-15). Hay cuatro clases de oyentes; sólo una clase buena.

1. Cuando "sembramos" sabemos que el diablo quitará la palabra de muchos corazones para que no crean y así no se salven. Lucas 8:12, Aquellos a lo largo del camino son los que han oído, pero después viene el diablo y arrebata la palabra de sus corazones, para que no crean y se salven.”

2. Sabemos que hay mucha tierra con poca profundidad (tierra sobre la piedra); que hay gente que con gozo recibirá la palabra, pero que no durará mucho tiempo (v. 6,13). Entre ellos no habrá crecimiento.

          3. Sabemos que hay muchos espinos (afanes, riquezas, placeres) que ahogan la palabra (v. 7,l4). Tampoco habrá cre­cimiento entre estos. Quieren poner al Señor en un pequeño rincón de su vida; no le dan mucha importancia.

          4. Pero gracias a Dios, cuando sem­bramos sabemos que también hay tierra buena, "los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y dan fruto con perseverancia" (v. 8,15). Por lo tanto, sembramos con ánimo.

 

V. "El Reino No Crece Mucho".

     A. "El mundo está lleno de maldad".

            1.  La parábola del trigo y la cizaña (Mat. 13:24-30; 36-43) nos ayuda a entender este problema.

            2. Cristo nunca dijo que su reino sacaría del mundo a todos los malos. Al contrario, dijo que seguirían juntos hasta el juicio final (v. 41).

            3. La doctrina del llamado "Rapto" dice que cuando Cristo venga El sacará a los suyos de entre los malos. Este texto dice lo opuesto.

            4.  Este texto da evidencia de que el Señor no emplea la violencia para hacer que su reino progrese. (Tampoco emplea la política, la fuerza de números, el apoyo del gobierno civil, etc.).

                 a. 2 Cor. 10:3-5, "las armas de nuestra milicia no son carnales".

                 b. Mat. 26:52, "Vuelve tu espada a su lugar".

                 c. 1 Jn. 3:8, "apareció...para deshacer las obras del diablo", pero no con armas carnales, sino a través del poderoso evan­gelio.

           5. Efes. 6:10-18, es conflicto espiritual, se usa armadura espiritual.

     B. El reino sí crece, pero ¿en qué sen­tido? ¿Qué dice El?

          1. "Es semejante al grano de mostaza" (Mat. 13:31,32, Otra parábola les contó Jesús: «El reino de los cielos es semejante a un grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo, y que de todas las semillas es la más pequeña; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de modo que las aves del cielo vienen y anidan en sus ramas».

          2, Manada pequeña. Luc. 12:32, “No temas, rebaño pequeño, porque el Padre de ustedes ha decidido darles el reino”

           2. "Es semejante a la levadura" (Mat. 13:33). No se oye, ni se ve, pero está obrando.

           3. Algunos lo hallan, como un "tesoro escondido" (Mat. 13:44).

           4. Lo importante es que se siembre mucha semilla. Que se siembre en muchos

corazones, para que obre.

 

VI. "La Semilla Brota Y Crece Sin Que El Sepa Cómo" (Mar. 4:26-29).

     A. El poder está en la semilla, no en el sembrador. Este ni puede explicar el proceso. "Duerme y se levanta, de noche y de día, y la semilla brota y crece sin que él sepa cómo".

          1. El hombre echa la semilla en la tierra, y espera.

     2. La semilla tiene vida en sí. Brota y crece en una manera misteriosa y secreta. Nadie puede explicar la vida, ni los cientí­ficos.

          3. La semilla es la Palabra (Luc. 8:11). Tiene vida (Heb. 4:12).

     B. Hay muchos cursos de estudio so­bre la obra personal. Hay peligro de concentrar nuestra atención demasiado sobre el adiestramiento del personal, en lugar de concentrar sobre lo más esencial: sembrar la semilla en los corazones de la gente, a tiempo y fuera de tiempo, y dejar que obre.

     C. La semilla produce la nueva vida, 1 Ped. 1:23, “Pues han nacido de nuevo, no de una simiente corruptible, sino de una que es incorruptible, es decir, mediante la palabra de Dios que vive y permanence”

     D. El proceso requiere tiempo. Sant. 5:7 " Por tanto, hermanos, sean pacientes hasta la venida del Señor. Miren cómo el labrador espera el fruto precioso de la tierra, siendo paciente en ello hasta que recibe la lluvia temprana y la tardía" El proceso no puede apresurarse. Tal vez Juan el Bautista no entendió esto.

     E. Pero el proceso es seguro. Sal. 126:, "Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas".

 

Conclusión:

     A. El crecimiento del reino comienza con la conversión genuina.

     B. El crecimiento del reino depende de que todos los discípulos de Cristo sean imitadores de Él, andando en sus pisadas. El crecimiento del reino tiene que ver con un verdadero cambio de corazón en todos los miembros del cuerpo de Cristo.

     C. Si existe el crecimiento espiritual en los seguidores de Cristo, entonces habrá crecimiento numérico también.

     D. Sólo se requiere que la semilla se siembre con paciencia. Tiene vida. Por lo tanto debemos enseñar, enseñar y seguir enseñando. El poder está en la semilla, no en el sembrador.

     E. El reino es semejante al grano de mostaza, a la levadura. No busquemos ningún crecimiento "sensacional".

     F. Pero si se busca el crecimiento numérico sin el cambio de corazón y el crecimiento espiritual lo que resulta no es crecimiento del reino, sino la corrupción del reino.