Mateo 5:5 Los mansos
Introducción.
A. ¡Felices son los mansos! Son herederos de las más ricas bendiciones de Dios, no solamente en el cielo, sino aun ahora en la tierra.
B. Todas estas bienaventuranzas son bien relacionadas. No describen a distintas personas, sino al verdadero discípulo de Cristo.
I. ¿Qué significan las palabras "manso" y "mansedumbre"?
A. No significan "cobarde", ni "tímido", ni "pasivo". Moisés era hombre muy manso (Núm. 12:3), pero reprendió severamente la idolatría del pueblo (Ex. 32:19). Jesús era manso (Mat. 11:29), pero demostró en varias ocasiones su valor al corregir a los judíos (Mat. 21:12,13; Jn. 2:14-16). Cuando uno de los alguaciles le dio una bofetada, Jesús dijo, "Si he hablado mal, testifica en qué está el mal; y si bien, ¿por qué me golpeas?" ¡Jesús no era nada tímido!
B. Lo opuesto de "manso" es "arrogante", "soberbio", u "orgulloso". Todo cristiano debe enojarse (Efes. 4:26), porque no debe ser indiferente hacia el pecado, pero el enojo sano requiere dominio propio.
C. El manso es sumiso a Dios, obediente, nunca rebelde ni desobediente. No resiste a Dios. Siempre dice, "Hágase tu voluntad y no la mía". Todos sus deseos, pensamientos, instintos, e impulsos están sujetos a la voluntad de Dios. Es controlado por Dios. Prov. 16:32, "se enseñorea de su espíritu". El dominio propio es, en realidad, el dominio de nuestras vidas por Dios, 2 Ped. 1:6; Tito 1:8, "dueño de sí mismo".
D. La mansedumbre es "fruto del Espíritu" (Gál. 5:22,23). A los contenciosos y arrogantes de Corinto Pablo habla de misericordia, amor y mansedumbre (1 Cor. 4:21; 2 Cor. 10:1). Los espirituales deben restaurar al hermano caído "con espíritu de mansedumbre" (Gál. 6:1). Esta virtud es compañera del amor y humildad (Efes. 4:2; Col. 3:12). Los predicadores y maestros deben corregir al oponente con el espíritu de mansedumbre (2 Tim. 2:24,25). Es lo opuesto del espíritu querelloso y pleitista (Tito 3:2). Es el espíritu que se necesita para aprender (Sant. 1:21). Se pone en contraste con celos amargos y contención (Sant. 3:13). Debemos dar razón de la esperanza con mansedumbre (1 Ped. 3:15).
E. Compárese el amansar caballos. Significa sujetarlos a la rienda, enseñarles la obediencia. Compárese también el agua turbulenta de una presa que produce la electricidad. Así debe ser el espíritu nuestro, controlado y utilizado por Dios en su servicio.
F. La mansedumbre está relacionada estrechamente con la humildad (es fruto de ella), y también con la misericordia, benignidad y paciencia.
1. Efes. 4:2, "con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros". Si somos mansos, somos pacientes y tolerantes; nos soportamos (Gál. 5:26). Muchos problemas en la iglesia serían solucionados si hubiera más mansedumbre entre los miembros.
2. Col. 3:12,13, "Vestíos de misericordia, de benignidad, de mansedumbre, de paciencia, soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros". Los mansos están dispuestos a perdonar.
G. El manso es sufrido. Su gentileza es conocida de todos, Fil. 4:5. Con buena voluntad soporta insultos y malos tratos. Recuérdese, el manso tiene bajo control los impulsos y emociones y toda la conducta. No se deja amargar, ni tiene espíritu vengativo. No es orgulloso ni arrogante.
H. El manso está dispuesto a sufrir agravio, ser defraudado, en lugar de causar escándalos en la iglesia, 1 Cor. 6:7.
II. Ejemplos de la mansedumbre.
A. Gén. 13:8,9, no contendió Abraham por sus derechos. Tenía "señorío", pero dio la preferencia a Lot. Dijo, "No haya ahora altercado entre nosotros dos, entre mis pastores y los tuyos, porque somos hermanos".
B. Núm. 12:3, "Y aquel varón Moisés era muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra". No era manso cuando mató al egipcio (Ex. 2:12); él quería identificarse con sus hermanos (los hebreos), pero todavía no estaba gobernado por Dios. Desde luego, aun después no fue perfecto, pues en alguna ocasión fue grandemente provocado por el pueblo y "habló precipitadamente con sus labios" (Sal. 106:32,33), pero Núm. 12:3 describe perfectamente el carácter de este gran hombre: "muy manso".
C. Mat. 11:29 Jesús, "manso y humilde de corazón"; 2 Cor. 10:1, "os ruego por la mansedumbre y ternura de Cristo". Mat. 21:5, Jesús es Rey de reyes, pero también manso. 1 Ped. 2:20-23 describe su mansedumbre en el sufrimiento.
D. 1 Tes. 2:7,11, "fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza que cuida con ternura a sus propios hijos ... así como el padre a sus hijos, exhortábamos y consolábamos a cada uno de vosotros". La ternura no es debilidad.
E. Como todos saben, Moisés, Jesús y Pablo no eran nada tímidos, ni pasivos, ni mucho menos cobardes. Eran muy fuertes y, por lo tanto, eran grandes líderes, pero tenían su fuerza bajo control.
F. Los mansos, pues, son verdaderos discípulos de Jesús, que demuestran el valor y fuerza, pero tienen bajo control la voluntad y las emociones. Recuérdese que el verdadero dominio propio significa bajo el control de Dios.
III. Recibirán la tierra por heredad.
A. Los "testigos" enseñan que literalmente los mansos recibirán la tierra por heredad, mientras que los 144,000 habitarán el cielo. (El número "144,000" no es literal, sino simbólico; significa el número completo de los redimidos, Apoc. 14:4).
1. La enseñanza de los "testigos" es otra de las ideas materialistas de que la tierra no será destruida (2 Ped. 3:10), sino que será renovada para ser habitada, sea para 1000 años, o para siempre.
2. Tales falsos maestros no tienen ni parte ni suerte en el reino de los cielos y, por lo tanto, no saben apreciar estas hermosas enseñanzas de Jesús. Esta secta es totalmente carnal en su trato de la Biblia. Sólo quiere hablar de la teocracia, de gobiernos mundanos, del Armagedón, etc. No les interesa la salvación, porque dicen que el hombre no tiene alma, y que no hay infierno. No son nada espirituales.
B. Solamente los falsos maestros que tuercen las Escrituras (2 Ped. 3:16) son capaces de enseñar que los pobres en espíritu, los que padecen persecución por causa de la justicia, etc. reciben el reino de los cielos, y que solamente los mansos heredarán una tierra renovada. ¡Qué tontería inexcusable!
C. Véase la expresión "Recibirán la tierra por heredad" en el Salmo 37:9,11,22. Originalmente la palabra "tierra" se refería a Canaán. "Recibir la tierra por heredad" llegó a ser expresión proverbial del mayor bien.
1. Significa, pues, las bendiciones supremas, la felicidad verdadera.
2. Ahora mismo los mansos, los verdaderos discípulos de Jesús, reciben las más ricas bendiciones del mundo, Mar. 10:29,30; 1 Cor. 3:20,21; 1 Tim. 4:8; 1 Ped. 3:10-12; Fil. 4:6-13, paz, tranquilidad, contentamiento.
3. El énfasis en todos estos textos es espiritual. Desde luego, Dios nos bendice físicamente, y nos prospera en muchas formas, pero es muy obvio que el énfasis es espiritual. (Por ejemplo, Mar. 10:29,30, ¿recibirán literalmente ahora en este mundo 100 madres? ¿o cien esposas?)
D. Los mansos son capaces de disfrutar de las más ricas bendiciones de la tierra (es decir, las bendiciones espirituales). Los soberbios, arrogantes, falsos maestros (como los "testigos"), y otros rebeldes no son capaces de disfrutar de ellas. No son bendecidos ahora y ¿qué les espera después?
E. ¿Cuándo, pues, heredarán los mansos la tierra? Ahora mismo. Mat. 5:5 nos da la promesa y garantía de recibir ahora mismo los beneficios más grandes del mundo si somos mansos. La una cosa acompaña a la otra. Si existe la condición (la mansedumbre), existirá al mismo tiempo la bendición. Considérese esta ilustración: "Felices son los que cancelan puntualmente sus deudas, porque ellos gozarán de buen crédito". ¿Cuándo serán felices, gozando de buen crédito? Al mismo tiempo que cumplan puntualmente sus compromisos. Una cosa coexiste con la otra. Siempre serán felices, gozando de buen crédito, si siguen pagando puntualmente sus deudas. De la misma manera, los mansos heredarán la tierra. La bendición coexiste con la condición, el carácter manso. Los mansos gozan automática e ineludiblemente, las más grandes bendiciones de la tierra, por ser mansos. El pecado trae su consecuencia negativa y la virtud trae su consecuencia positiva. Compárese Gál. 6:7,8.
Conclusión.
A. Dichosos son los mansos. ¿Quiénes son? Las palabras "manso" y "mansedumbre" no tienen nada que ver con la debilidad, ni mucho menos con la cobardía. Recuérdense siempre los grandes ejemplos de Cristo, Pablo y Moisés.
B. Los mansos son los humildes, los que están sujetos a Dios. El manso ha entregado las riendas de su vida a Dios. Dios tiene las riendas para controlar la voluntad, las emociones, los impulsos y toda la conducta del manso.
C. Los mansos recibirán la tierra por heredad; es decir, disfrutan ahora mismo las más grandes, las más ricas, bendiciones de la tierra. Son los únicos capacitados para hacerlo.
D. 1 Cor. 3:22, "todo es vuestro ... sea el mundo, sea la vida, sea la muerte, sea lo presente, sea lo por venir, todo es vuestro".
Preguntas sobre Mat. 5:5, los mansos.
1. ¿Qué significan las palabras "manso" y "mansedumbre"?
2. ¿Son los mansos personas débiles y cobardes?
3. ¿Cómo son los que no son mansos?
4. ¿Qué significa "amansar" animales?
5. ¿Cuál es la relación entre "la mansedumbre" y "la paciencia" en Efes. 4:2 y Col. 3:12,13?
6. ¿Cómo se clasifica la mansedumbre en Gál. 5:22,23?
7. ¿Qué recomienda Pablo en 1 Cor. 6:7?
8. ¿Cómo demostraron la mansedumbre Abraham (Gén. 13:8,9), Moisés (Núm. 13:3), Cristo (Mat. 11:29), y Pablo (1 Tes. 2:7,11)?
9. ¿Será renovada y poblada la tierra cuando Cristo venga? Véase 2 Ped. 3:10.
10. ¿Enseña la Biblia que los 144,000 estarán en el cielo y que los demás estarán aquí en la tierra? ¿Qué grupo religioso enseña estas doctrinas?
11. ¿Qué significaba para los judíos la expresión "recibirán la tierra por heredad"? Véase Sal. 37, y especialmente los vers. 9,11,22.
12. ¿Son materiales o espirituales las bendiciones mencionadas en Mar. 10:29,30?
13. ¿En qué sentido es "nuestro" el mundo? 1 Cor. 3:20,21.
14. ¿Cuándo heredarán los mansos la tierra?
15. ¿Son distintas personas los "pobres en espíritu", "los que lloran", y "los mansos"?
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