Nombres falsos y desagradables

Introducción:

          Siempre los que no han podido refutar un argumento basado en la verdad han tratado de desacreditar el argumento y al que lo hace empleando nombres falsos y desagradables. Estos nombres o sean epítetos se usan para nublar la cuestión, para confundir, para perjudicar y para desacreditar. Los fariseos, escribas y los judíos en general empleaban este táctico para desacreditar a Cristo ante los ojos de la gente.

I. Nombres falsos o despreciativos aplicados a Cristo

          A. Blasfemador - Mat. 9:3.

          B. El Nazareno - Mat. 2:23; Juan 1:46.

          C. Engañador - Mat. 27:62, 63.

II. Nombres falsos aplicados a la Palabra de Cristo

          A. Palabras contradictorias - Juan 7:16.

          B. Puras fábulas - 2 Ped. 1:16.

          C. Blasfemias - Juan 6:63.

          D. Palabras muertas y sin significado - 1 Ped. 1:23; Heb. 4:12; 2 Tim. 3:16, 17.

III. Nombres falsos dados a los discípulos de Cristo

          A. Ladrones - Mat. 27:64; 28:13.

          B. Mentirosos - Mat. 27:64.

          C. Blasfemadores - Hech. 6:8-11.

          D. Levantadores de sediciones - Hech. 24:5.

          E. Alborotadores del mundo - Hech. 17:6-8.

IV. Nombres falsos dados a la iglesia

          A. Una secta - Hech. 24:5. No la es - Ef. 1:22, 23.

          B. Un grupito con nombre asumido y no escritural - Rom. 16:16.

          C. El grupito que cree que solamente ellos van a ser salvos - Col. 1:18; Ef. 4:4; 5:23.

          D. Campbelistas - Hech. 11:26.

Conclusión:

          La astucia de crear prejuicio por medio de nombres falsos y desagradables todavía existe, aun entre los de la iglesia. Frecuentemente se ven nombres como "anti-progresista," "anti-cooperación," "Anti-huérfano," "Perros veladores," "Mentes trastornadas" etc.